Noruega se viste de gala: del vestidazo de Ingrid al debut del chamán prometido de Marta Luisa
La princesa Ingrid Alexandra de Noruega cumplió 18 años el pasado mes de enero, pero debido a la pandemia la Casa real anunció que aplazaría su celebración hasta junio cuando las circunstancias fueran más favorables. Así llegamos hasta ahora que en el país escandinavo se celebra a lo grande la mayoría de edad de la futura reina, la hija mayor de los príncipes herederos Haakon Magnus y Mette-Marit de Noruega.
La joven Ingrid Alexandra ya es toda una mujer y el Palacio ha dejado claro que empezará a incluirla en más actos oficiales acordes a su futura como heredera. No solo se le cedió su primera tiara del joyero real, incluso ya tiene una oficia dispuesta dentro del Palacio Real.
Para este viernes, los Reyes Harald y Sonia de Noruega han preparado un gran festejo en honor a su nieta en el Palacio Real, por tanto se han asegurado de reunir a las casas reales europeas lo que significará que veremos reunidos a Guillermo y Máxima de Holanda junto a la princesa Amalia, la reina Matilde de Bélgica junto a su hija la princesa Elisabeth, Victoria y Daniel de Suecia o el Rey Felipe VI, que acude en solitario a la cena en honor a su ahijada, siendo una decisión polémica debido a que se esperaba que Leonor compartiera con el resto de futuras reinas.
Tristemente deberemos esperar para ver a Leonor en un evento de esta categoría, pero en cualquier caso, la familia real noruega se ha reunido un día antes debido a las celebraciones del Gobierno de Noruega en honor a Ingrid Alexandra.
Sin lugar a dudas Ingrid Alexandra fue la gran protagonista de la noche. Estaba visiblemente emocionada y encantada con los preparativos del gobierno y el apoyo de los ciudadanos. La princesa fue recibida por el primer ministro de Noruega, Jonas Gahr Store; la alcaldesa de Oslo, Marianne Borgen y el ministro de Finanzas, Trygve Slagsvold Vedum en la biblioteca Deichman Bjorvika.
En dicho lugar, Ingrid Alexandra pronunció un discurso donde se mostró humilde. "Gracias a todos los que han ayudado a hacer de esta velada una experiencia maravillosa para mí y para todos los que están aquí hoy", expresó la futura reina. "También me gustaría agradecer a todos los invitados que han venido de todas partes del país. La experiencia se vuelve aún más valiosa cuando tengo a tantos con quienes compartirla", agregó.
La segunda en la línea de sucesión demostró que pese a que le gusta robar ciertos estilismos de su madre, en esta ocasión quería brillar y por eso le vimos lucir uno de los vestidos más encantadores de la velada. Era un diseño de fiesta confeccionado en combinación de tejidos como seda, poliéster o algodón. El vestido con escote de princesa pertenece a la firma Monique Lhuillier y cuenta con torso tipo corset con el detalle de pequeños lunares dorados muy brillantes. Completó su estilo con una capa semitransparente que elevaba su elegancia y unos salones de Christian Louboutin que pertenecen a su madre.
Además del gran debut de Ingrid Alexandra en este tipo de actos, otro que ha debutado fue Durek Verrett, el prometido chamán de la princesa Marta Luisa de Noruega. Tras dos años de noviazgo, la pareja anunció su compromiso siendo este un gran boom en la sociedad noruega. Tanto Marta Luisa como Verrett habían incomodado a la Casa real por sus declaraciones explosivas y por su fanatismo con los místico, la propia princesa ha llegado a confesar que habla con los ángeles.
Luego de la polémica generada por las conferencias donde Marta Luisa utilizaba sus títulos, ella junto a sus padres y hermano decidieron que su título se restringiría estrictamente a los actos oficiales. Verrett, por su parte, decidió mantener un perfil bajo para evitar las polémicas dentro de su relación con la princesa europea. La pareja llegó tomada de la mano y luciendo felices, siendo este un momento de euforia para Marta Luisa tras el trágico suicido de su ex esposo y padre de sus hijas, el escritor Ari Behn.
Al festejo también acudieron los hermanos de Ingrid Alexandra. Nos referimos a Marius Borg Høiby, el apuesto hijo mayor de Mette-Marit que tuvo antes de conocer al heredero de la corona, y a Sverre Magnus de Noruega, el menor de los hermanos que se ve más crecido y apuesto. La familia desfilo hacía el lugar al ritmo de ABBA, un simpático guiño por parte del gobierno noruego que ayudó a cambiar el ambiente pesado de este tipo de eventos. @mundiario
