¿Quién pierde más en el conflicto político entre Argelia y España?
Vladimir Putin puso a temblar a Europa con su invasión a Ucrania, pero no se trata únicamente de un problema armado, porque además el líder ha aplicado desde unas semanas un bloqueo a todas las naciones que se opongan a pagar en rublos los principales productos que exporta Rusia, entre ellos el gas.
España es uno de sus mejores clientes, aunque desde La Moncloa están alineados con las políticas de la OTAN y a favor de la resistencia que lidera el presidente Volodímir Zelenski, pero a pesar de la invasión, en lugar de reducirse la dependencia ha ocurrido todo lo contrario.
De acuerdo a la publicación web El Periódico de la Energía, la dependencia de España hacia el gas natural ruso es una realidad y peor aún, es una realidad que ha aumentado. "Según el Boletín Estadístico del Gas del mes de mayo, el GNL procedente de Rusia alcanza el 9% del total de las importaciones que han superado los 36.000 GWh. Se sitúa en cuarta posición en el ranking de suministradores."
Si los españoles pensaban que las cosas no podían ser peores, llega un nuevo conflicto, que pone en jaque mas de 3.000 millones de euros en exportaciones y además la posibilidad de encontrar un reemplazo al gas ruso. Pedro Sánchez dio un giro en su posición con respecto al conflicto del Sáhara, y el resultado es que Argelia ha congelado sus relaciones comerciales con España.
Todo un problema si se tiene en cuenta que, según Repsol, la nación africana se ubica en la casilla número 14 dentro de la clasificación de países con mayores reservas de petróleo. "Además, se considera uno de los países líderes del mundo en reservas de gas natural".
Teniendo la potencialidad de Argelia en contexto, La Razón explica que desde su territorio exportan a España un 50% del gas que se consume en la península y advierte de que, en teoría, aunque la entrada de gas argelino a través del gasoducto Medgaz estaría garantizado por contrato hasta 2032, en caso de que las tensiones aumenten entre Madrid y Argel, podrían aplicar unilateralmente "cortes parciales o incluso totales que deberían resolverse mediante un arbitraje internacional. Especialmente si el suministrador detecta que se está revendiendo su gas a Marruecos."
La pregunta del millón es si Argelia realmente quiere hacer eso, porque como indica el rotativo, también saldría perjudicada, "ya que la venta de hidrocarburos supone el 90% del PIB argelino, y España sigue siendo clave en su negocio de gas". No obstante, el Gobierno de Sánchez tendría más que suficientes motivos para esta tensión entre los países le pase factura a las empresas energéticas como Repsol, Naturgy e Iberdrola, que podrían sufrir la furia de las autoridades argelinas. @mundiario
