El Gobierno anuncia un complemento de 378 euros anuales a la pensión por hijo

Recuperar la estabilidad económica perdida en 2020. Esa es la tarea pendiente de los ciudadanos españoles luego del peor ciclo de recesión que el país ha enfrentado en la última década. El Gobierno recurre a la liquidez, al estímulo, aumento del gasto público. Son medidas expansivas que, al menos por ahora, tienen cierto atisbo desostenibilidad para la Hacienda pública.

Y es que el nuevo complemento para reducir la brecha de género que existe en las pensiones en España -un problema estructural de larga data en el país ibérico- sumará una cuantía fija de 378 euros anuales en la pensión del beneficiario por cada hijo -desde el primero y hasta un máximo de cuatro-, una medida con un costo de 700 millones de euros solo para este año.

Esta política representa un importante estímulo al poder adquisitivo de la población en un contexto de caída de ingresos sin precedentes en la historia moderna de la economía española, pues el desempleo llegó a superar la barrera de los 800.000, lo cual destruyó la inmensa cifra de 760 millones de euros en salarios, que ahora el Ejecutivo intenta reponer.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros donde se ha aprobado la medida, el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá ha asegurado que “hasta ahora este complemento, aprobado por el Gobierno del PP en 2016, era a partir del segundo hijo con un porcentaje adicional sobre la pensión que iba desde el 5 % más por dos hijos, al 10 % por tres y un 15 % por cuatro o más”.

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Esa cuantía revaloriza los ingresos, pero aunque funcionen como un paliativo, no es el sustituto de los necesarios ajustes que aún exigen los pensionistas en aras de una remuneración mucho más acorde con la realidad económica de España, sobre todo en el actual contexto de recesión, desempleo y caída exponencial de los ingresos privados. @mundiario