Biden aboga por la unidad en la apertura de la IX Cumbre de las Américas

Alberto Fernández, presidente de Argentina y Joe Biden, presidente de EE UU. / RR.SS.
Alberto Fernández, presidente de Argentina y Joe Biden, presidente de EE UU. / RR.SS.

El presidente de EE UU ha dado inicio a la reunión de más alto nivel con la presencia de una veintena de presidentes, una decena de ausencias y la exclusión de tres Gobiernos.

Biden aboga por la unidad en la apertura de la IX Cumbre de las Américas

El presidente estadounidense, el demócrata Joe Biden, ha inaugurado este miércoles la novena edición de la Cumbre de las Américas, en la californiana ciudad de Los Ángeles, tras dar un discurso dirigido a todo el continente, en el que dio a conocer nuevos planes de inversión en la región y que abogó en todo momento por la unidad panamericana.

Con el desafío de convencer a los mandatarios del hemisferio occidental para pactar medidas contra la inmigración, el cambio climático o la erosión democrática, Biden ha iniciado su discurso enfrentando la polémica que ha empañado la cumbre desde antes de que se enviaran las primeras invitaciones: la exclusión de los regímenes Cuba, Nicaragua y Venezuela de la reunión de jefes de Estado y de Gobierno.

No se refirió directamente a la decisión de su administración de no extender las invitaciones hasta estos tres países, pero sí ha defendido su postura al recordar la Carta Democrática que fue suscrita por todos los países en la tercera edición de la cumbre, y el consecuente compromiso de las Américas por luchar a favor de la protección de las democracias y de los derechos humanos.

Volvamos a unirnos y renovemos nuestra convicción de que la democracia no solo es el rasgo definitorio de la historia americana, sino un ingrediente esencial de los futuros americanos", ha pedido Biden. “No siempre acordamos en todo, pero porque somos democracias trabajamos en nuestros desacuerdos con respeto mutuo y diálogo”, ha dicho.

No obstante, las palabras del mandatario estadounidense han ocurrido en medio de un escenario de crispación política, con una América Latina bastante polarizada que ha derivado en la ausencia de una decena de presidentes de la izquierda y de la derecha, que han enviado en su lugar a sus cancilleres para demostrar su descontento con la exclusión de los regímenes totalitarios (en el caso de la izquierda) en rechazo a la postura de Biden hacia sus gobiernos (Guatemala y El Salvador) y el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou que debió cancelar su viaje al dar positivo por covid-19

Biden promete nuevas y millonarias inversiones

Como había sido adelantado este martes, el presidente Joe Biden anunció la creación de un Cuerpo de la Salud de las Américas, para fortalecer la capacitación de los profesionales sanitarios en la región. Aunado a ello, el mandatario norteamericano ha hecho nuevos anuncios en materia económica y de integración regional en un intento por seducir a sus homólogos.

En este sentido, el líder demócrata ha adelantado el lanzamiento de la Alianza Americana para la Prosperidad Económica, un innovador mecanismo que persigue el ambicioso objetivo de “incrementar las oportunidades y acabar con las inequidades”. Esta nueva plataforma vendría de la mano de una propuesta de reforma sobre el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para favorecer el papel de la empresa privada en el desarrollo de la región.

"No hay ninguna razón por la cual el continente americano no pueda ser seguro, próspero y democrático, desde el norte de Canadá a la punta sur de Chile. Tenemos todas las herramientas que necesitamos", insistió el presidente. También anunció que el viernes los países asistentes firmarán un mandato de las Américas, que incluirá las medidas diseñadas para hacer frente a los desafíos pautados en esta cumbre.

De esta manera, al final de la semana se tendrá lista, firmada y sellada la Declaración de Los Ángeles, un documento que, por los momentos, permitirá abordar las problemáticas con “un nuevo enfoque” en el que todas las naciones asumirán su responsabilidad, especialmente en materia migratoria.

Al respecto, Biden ha afirmado que la inmigración irregular es “inaceptable” y que la migración “bien hecha” resulta muy beneficiosa para el país receptor cuando se hace desde la formalidad. Biden ha asegurado que los nuevos pactos ofrecerán mayor “estabilidad” cuando su país está experimentando un aumento sin precedentes en el fenómeno migratorio indocumentado, particularmente de venezolanos, cubanos, centroamericanos y haitianos.

La administración Biden en la apertura

La primera en ofrecer su discurso fue la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, el cual inició alabando y agradeciendo que la cumbre se celebre en la ciudad donde “los sueños se hacen realidad” en su estado natal, California. Harris, quien recientemente ha tenido un acercamiento con las naciones del Triángulo Norte, ha recordado que “las alianzas entre los que estamos aquí son esenciales” para lograr un futuro inclusivo y diverso.

“Los desafíos de nuestro hemisferio en los próximos años son significativos. Por eso, para resolverlos vamos a requerir de coaliciones, y oportunidades para lanzar más iniciativas y para construir nuevas alianzas”, ha anexado la funcionaria estadounidense.

En otro lugar apartado del Teatro Microsoft, donde se dio la apertura, el secretario de Estado de Biden, Antony Blinken, aseguró que, aunque muchos ciudadanos no lo crean, lo que pase en América Latina y el Caribe repercute directamente en la vida de los estadounidenses.

“Dependiendo de cómo le vaya al hemisferio, nos irá a nosotros”, ha matizado Blinken desde el Foro Empresarial de la cumbre, uno de los tres que se realizan con la sociedad civil al margen de la reunión de jefes de Estado.

Blinken ha asegurado que las diferencias políticas son una “fortaleza” y que recibir a las 35 naciones soberanas del continente es un ejemplo de ello. “Tenemos gobiernos democráticos de izquierda, de derecha y de centro. Pero a pesar de las diferencias políticas que existen, si los fundamentos están ahí, podremos trabajar juntos de manera muy, muy efectiva”, aseguró.

El cara a cara de Fernández y Biden

La apertura de la IX Cumbre de las Américas ocurrió con muchas sorpresas. Se inició con la llegada de los líderes, en las que los presidentes y ministros llegaron poco a poco al teatro, escoltados por una patrulla y efectivos militares de EE UU. Cada líder transitó una larga alfombra roja con forma de “L”, en medio de un pasillo de militares que sostenían todas las banderas de la región, incluyendo las de las Naciones Unidas y la Organización de los Estados Americanos (OEA) menos las de Cuba, Nicaragua y Venezuela.

A medida que cada representante ingresaba al recinto, era bienvenido por Joe Biden y su esposa, la primera dama Jill Biden, para saludarse y tomarse una fotografía. Lejos de ser tenso, el encuentro entre Biden y el presidente argentino Alberto Fernández fue sorpresivamente muy efusivo, cálido e incluso íntimo.

Fernández, supuestamente la “voz de Venezuela” según Maduro, y del bloque que se opuso a la exclusión, tardó segundos de más conversando y abrazando a su homólogo estadounidense, que los integrantes del protocolo tuvieron que cortar los saludos para no retrasar, aún más, el evento.

El discurso de Pedro Castillo

Repleto de música y de esperas, la inauguración comenzó mostrando contenidos audiovisuales de la riqueza en diversidad de las Américas. Pedro Castillo fue el único mandatario, además del anfitrión, que dio un discurso, debido a su calidad de presidente del Perú, la sede de la cumbre pasada realizada en Lima en 2018.

“Esta plataforma (...) constituye una vez más una valiosa herramienta de gestión para pasar de las palabras a los hechos”, afirmó Castillo acerca de las cumbres, sin mencionar tampoco la polémica de exclusión. También alegó a la temática central de la edición pasada: la lucha contra la corrupción, a pesar de ser investigado en su país por, presuntamente, haber cometido delitos de este tipo. Cerró su intervención citando la histórica frase “América para los americanos”. @mundiario

Comentarios