Rusia hace del funeral de Daria Dugina una justificación para aumentar el asedio a Ucrania

Daria Dugina, periodista. / RR SS.
Daria Dugina, periodista. / RR SS.
El ultranacionalismo marca la ceremonia de despedida de la hija del filósofo cercano a Putin, Alexander Dugin, que fue asesinada el pasado sábado por un coche bomba.
Rusia hace del funeral de Daria Dugina una justificación para aumentar el asedio a Ucrania

Daria Dugina ha sido despedida en Rusia en un funeral que el Kremlin ha utilizado con objetivos políticos y propagandísticos. La periodista y politóloga falleció tras una explosión ocasionada por una bomba colocada en su coche durante el pasado 20 de agosto, cuando regresaba a Moscú. Su funeral ha servido al gobierno ruso para afianzar sus objetivos contra Ucrania, todo gracias a quien era Dugina en el complicado tablero político internacional.

La joven era una más entre millones de personas, quizás desconocida para gran parte del mundo. Pero el truco en todo lo que ha pasado está en quién es su padre. Se trata del filósofo de ideas ultranacionalistas Alexander Dugin, a quien se le ha llamado como el "Rasputin de Putin", siendo señalado como la persona que susurra al presidente ruso las ideas más radicales contra Ucrania. De su vecino país ha asegurado que debe ser destruido, que hay que matar a los ucranianos y claro que ha apoyado las acciones bélicas de Rusia contra este país.

“Papá, siento la guerra en mí, me siento una heroína. No quiero otro destino. Quiero estar con mi país, con mi pueblo; quiero estar del lado de las fuerzas de la luz”, habrían sido las últimas palabras de la periodista, según ha afirmado su padre duran el funeral. 

La investigación determinó -apenas 48 horas después- que había sido un ataque ordenado desde Kiev, que habría enviado una ciudadana ucraniana para perpetrar el ataque. Igualmente, Rusia acusó a Estonia de amparar a una terrorista.

¡Porque ella murió por el pueblo! ¡Por Rusia, por el frente!”, fueron algunas de las aseveraciones de Dugin, quien afirmó que la muerte de su hija debe ser “el precio más alto, que debe ser pagado y puede que solo lo justifique la victoria. Nuestra victoria”.

El filósofo es fundador del partido Nacional-Bolchevique que se ha convertido en la máxima referencia del ala más radical del Gobierno ruso. Durante el funeral se vio a Alexander Dugin y Natalia Melentieva, quienes vistieron de riguroso negro. Estuvieron acompañados de poderosos personajes como el empresario Konstantín Maloféyev o el vicepresidente de la Duma Estatal y miembro del partido de Putin, Serguéi Neverov. El presidente no asistió a la ceremonia, sin embargo, concedido un galardón póstumo a Dugina “por su dedicación al deber profesional”. En uno de sus últimos trabajos, la politóloga y periodista acusó a Occidente de simular la masacre de Bucha.

Este 24 de agosto será especialmente intenso si se toma en cuenta que se cumplen seis meses desde que comenzó la guerra y justo es el día en que Ucrania celebra su independencia de la Unión Soviética. No sería casualidad que el Kremlin prepare una ofensiva utilizando como excusa la muerte de Dugina. 

El Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB) mantiene que el ataque contra la periodista fue perpetrado por una supuesta militar ucraniana que llegó a Moscú junto a su hija de 12 años. Según el Kremlin, habría estado presente en el lugar donde ocurrió el ataque y luego huyó a Estonia. Pese a todas estas afirmaciones, no las autoridades rusas no han revelado mayores pruebas. @mundiario

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