El PSOE chupa rueda del PP aunque puede pinchar por algunas alianzas

Pedro Sánchez, ex secretario general del PSOE. / Mundiario
Pedro Sánchez, secretario general del PSOE. / Mundiario

Después de subirse al carro del poder en varias comunidades y ayuntamientos, el PSOE ha mejorado en las encuestas siguiendo la senda también alcista del PP. ¿Hasta cuándo?

El PSOE chupa rueda del PP aunque puede pinchar por algunas alianzas

Después de subirse al carro del poder en varias comunidades y ayuntamientos, el PSOE ha mejorado en las encuestas siguiendo la senda también alcista del PP. ¿Hasta cuándo?

 

El poder siempre tiene un atractivo, el placer de apostar a caballo ganador. Luego vienen los hechos y los problemas que traen consigo, y ese problema es el precio que se paga por las alianzas, los silencios forzados, y la tolerancia frente a credos ajenos que los seguidores, los originales, no quieren tolerar. Hay un programa y un discurso que está hecho al gusto de militantes y seguidores pero esas alianzas que fueron necesarias para alcanzar el poder pasarán factura si se les da tiempo, y en este caso lo van a tener. Los Compromis,  los Mes, los Podemos, las Mareas y hasta Bildu, con los que ha coqueteado empiezan a cometer múltiples ilegalidades. Un día es una bandera que se retira u otra que aparece fuera de lugar, otro es una foto o un busto que se niegan a poner, o cambian hasta la letra del himno auronómico, y por supuesto no se paran a controlar el déficit ni la deuda y el PSOE tolera y tolera mientras España se va convirtiendo en un nuevo reino de taifas sin autoridad, sin disciplina o moviéndose fuera del marco legal.

No es cuestión de exculpar al PP que lo máximo que hace es no hacer nada y mirar hacia otro lado, pero los votantes del PSOE no se van a conformar con su poder local, querrán además ejercerlo. Mientras en Cataluña todo apunta a que la balanza se inclinará hacia el platillo donde se suba Podemos que esta teniendo graves dificultades para poder ir a las elecciones con sus siglas. De momento sus aliados, los que ahora le niegan el pan, se dedican a obras de caridad dirigiendo el gasto público hacia libros de texto, emigrantes, viviendas, comidas, y otras acciones necesarias y con buena acogida, pero que suponen un gasto que no se compensa con una reducción de sueldo o yendo a trabajar en metro o en bicicleta. Ese presupuesto, que es el que todos quisieran hacer, solo puede compensarse con fuertes recortes o con incremento de ingresos  en cuya dirección no se ha visto avanzar a nadie lo que invita a pensar que este año se disparará el déficit de Autonomías y Ayuntamientos, y por lo tanto de todo el Estado.

Es de suponer que si Podemos se ve obligado a renunciar a su proyecto a favor de los múltiples proyectos locales que ellos mismos se encargaron de aupar, se plantee una coalición con el PSOE, algo que los socialistas negarán cara al voto pero que nadie duda se produciría después de las elecciones. Quizás si la izquierda del PSOE, que hoy por hoy son Podemos e IU, tuviesen un líder tipo Santiago Carrillo, que acepte el orden constitucional aunque sea para modificarlo pero respetando la ley, este problema no existiría. Lo que le falta al PSOE es un líder con capacidad de poner disciplina a su nuevos barones locales y exigir a sus socios respeto a la legalidad, aunque los desmanes se produzcan el sitios no gobernados por ellos sino por los socios.

Mientras esto no ocurra, y Sánchez e Iglesias impongan un criterio legal en sus reinos locales, la gente empezara a pensar que con ellos viene el caos y el PP seguirá dominando las encuestas.

Comentarios