Reino Unido alerta de que la nueva cepa de covid-19 es un 30% más mortal

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson (centro), junto a su principal asesor científico, Patrick Vallance (derecha). / Sky News
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson (centro), junto a su principal asesor científico, Patrick Vallance (derecha). / Sky News
El asesor científico del Gobierno británico asegura que considera “la posibilidad de que la covid-19 estará presente para siempre, pero será controlada".
Reino Unido alerta de que la nueva cepa de covid-19 es un 30% más mortal

Las alarmas se encienden en todo el planeta, nuevamente. La tercera pandemia más devastadora que haya conocido la humanidad, y que lamentablemente ha segado más de 400.000 vidas, sigue evolucionando, ganando fuerza, ganando terreno y tomando formas que amenazan con volverse desconocidas para la ciencia luego de que, contra todo pronóstico, el mundo cerrara 2020 con el alivio de una vacuna eficaz contra el nuevo coronavirus, que aún no ha sido distribuida ni siquiera al 10% de la población global. 

Y es que, en ese contexto en el que ahora el enorme reto es hacer que las vacunas lleguen a todos (7.700 millones de personas), el Gobierno de Reino Unido no anduvo con rodeos y su primer ministro, Boris Johnson, ha sido claro y directo con su país, pero también con la comunidad internacional. Su mensaje ha sido tajante: la variante de la Covid-19 surgida y detectada en suelo británico no solo es mucho más contagiosa, sino que comienzan a ya existen “evidencias” de que sería “aún más mortal”, dijo el mandatario inglés este viernes en una rueda de prensa desde Londres.

Esta nueva mutación del SARS-CoV-2, el virus que produce la enfermedad de la covid-19, es un 30% más mortal en las personas mayores de 60 años. Así lo dio a conocer el científico jefe del Gobierno británico, Patrick Vallance, quien también explicó lo siguiente: “En la población de 60 años o mayores, de cada 1.000 personas infectadas son 10 las que pueden morir por la enfermedad. Con la nueva variante del virus, ese riesgo se eleva a 13 o 14 personas”.

Por lo tanto, esa cepa posee una estructura genética que le permite tener una mayor cantidad de proteínas S, las cuales inserta en los receptores de las células humanas y, al acoplarse en ellos, se replica y propaga el ARN del virus en todo el cuerpo. El detalle radica en que la ciencia pueda entender cómo lograr que las vacunas disponibles, sobre todo las más potentes hasta ahora, que son las de Pfizer y Moderna, mantengan su capacidad de generación de anticuerpos con la misma velocidad del ARN mensajero que extrae partes del código genético del coronavirus. 


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“Las pruebas no son todavía muy firmes y las cifras siguen arrojando incertidumbre, pero suponen un motivo de preocupación. Hasta ahora esa mayor mortalidad no se ha visto reflejada entre los pacientes hospitalizados”, detalló el principal asesor científico del Reino Unido, también líder del equipo de Boris Johnson contra la pandemia.

Esto no quiere decir que el número de fallecimientos vaya a aumentar exponencialmente en el Reino Unido y en el resto del mundo, pero es una clara advertencia a todos los países de que deben tomar las medidas adecuadas de detección de casos, exigencia de pruebas PCR negativas para entradas de viajeros, uso obligatorio de mascarilla y una distribución organizada con apoyo financiero de los Gobiernos a los programas de vacunación.  

Esta nueva variante de Covid-19 se detectó por primera vez en el condado de Kent, en la capital británica, Londres, lo cual forzó al Gobierno de esa nación a acelerar los procesos de secuenciación del genoma del virus para comprender cada vez más cómo funcionan y ocurren las mutaciones. El organismo encargado de esa tarea es el Covid-19 Genomics Consortium (Cog-UK, o Consorcio de Genomas de Covid-19, por sus siglas en inglés), que surgió de la colaboración y cofinanciación de Public Health England (Sanidad Pública de Inglaterra, el órgano gestor del sistema público de salud), la fundación Wellcome Sanger Institute y hasta 12 instituciones académicas. 

Esa red de instituciones reúne a un equipo multidisciplinario de expertos que ha estudiado cuáles son los componentes del virus responsables de su rápida mutación. Durante toda la pandemia, Cog-UK ha extraído y secuenciado los códigos genéticos de más de 150.000 muestras del coronavirus. Eso equivale a la mitad de las secuencias realizadas en todo el mundo. Sin duda, la batuta y el liderazgo de la exploración de la comunidad científica internacional sobre este impredecible patógeno la tienen los británicos.

La llamada ‘cepa británica’ no es la única mutación que existe del coronavirus. Más de 70 mutaciones se han registrado en ese microorganismo desde que se detectó su origen en diciembre de 2019 en Wuhan, China, la zona cero de la pandemia, pero las variantes más contagiosas y peligrosas, además de la surgida en Reino Unido, son las de Brasil y Sudáfrica, que ya se extienden en países de Europa y algunos de América Latina, principalmente la brasileña, pero aún no ha llegado a las naciones de América del Norte como México, Canadá y Estados Unidos. 

El asesor científico del Gobierno británico aseguró en su rueda de prensa que considera “la posibilidad de que el coronavirus estará presente para siempre”, pero cree que será "controlado" por los amplios avances en vacunas y tratamientos. Es decir, tal y como advirtió la OMS, la covid-19 se convertirá en una enfermedad o virus endémico similar a la gripe y la influenza.

Además, el experto británico subrayó que "los individuos que han sido infectados previamente y han generado anticuerpos parecen estar igualmente protegidos contra el virus original y la nueva variante". Este descubrimiento es un alivio que da ventaja a las compañías farmacéuticas para reforzar la estructura del sistema de ARN mensajero de la vacuna, que es el motor generador de anticuerpos en las células humanas contra el coronavirus y previene las infecciones.

Por lo tanto, la pandemia sigue tomando formas que no hacen sino saturar los sistemas de salud pública y agravar las espirales de pobreza que hay en varios países del mundo. El objetivo de la comunidad internacional ahora pasa por controlar los focos de rebrotes que, al incrementar la velocidad de los contagios, influyen en posibles futuras mutaciones de un virus que ha alterado todo el sistema de vida de la humanidad como nunca antes se había visto en el siglo XXI. @mundiario

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