Nueva York prohibirá por ley la discriminación por peso y estatura
Según el acalde de la ciudad, Eric Adams, esta medida protegerá contra la discriminación, pues “todos merecemos el mismo acceso al empleo, la vivienda y los lugares públicos, independientemente de nuestra apariencia”.
El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, firmó este viernes una ley que prohibirá la discriminación basada en el tamaño del cuerpo al agregar el peso y la altura a la lista de categorías protegidas como la raza, el sexo y la religión. Y es que según el burgomaestre demócrata, “todos merecemos el mismo acceso al empleo, la vivienda y los lugares públicos, independientemente de nuestra apariencia”.
La ordenanza, que entrará en vigor el próximo 22 de noviembre, “ayudará a nivelar el campo de juego para todos los neoyorquinos, creará lugares de trabajo y entornos de vida más incluyentes y protegerá contra la discriminación”, explicó Adams, quien estuvo acompañado por otros funcionarios y defensores de la aceptación de la gordura en la ceremonia de la firma en el Ayuntamiento.
Ahora bien, la medida no ha sido bien recibida por todos. De hecho, algunos líderes empresariales expresaron su oposición a la legislación cuando estaba ante el consejo, alegando que el cumplimiento podría convertirse en una carga onerosa. “El alcance del impacto y el costo de esta ley no se ha considerado completamente”, señaló en un comunicado Kathy Wylde, presidenta y directora general de Partnership for New York City.
¿En qué consiste la ley?
La nueva legislación prohibirá la discriminación basada en el tamaño o el peso del cuerpo. Sin embargo, contempla alguna excepción en los casos en que los reglamentos federales, estatales o locales exijan la necesidad de llevar a cabo ciertos esfuerzos físicos (como por ejemplo, bomberos o empleados de recogida de basura).
Para Tigress Osborn, presidenta de la Asociación Nacional para el Avance de la Aceptación de la Gordura, la adopción de la nueva ordenanza por parte de la ciudad “repercutirá en todo el mundo” y demostrará que “la discriminación de personas en función del tamaño de su cuerpo está mal y es algo que podemos cambiar”.
Este veto también ha sido aplicado en otras ciudades de Estados Unidos, incluidas San Francisco, Washington D.C y Madison. Incluso, se han introducido iniciativas para prohibir la discriminación por peso y estatura en estados como Nueva Jersey y Massachusetts.
En 2019, Nueva York fue la primera ciudad estadounidense en emitir unas guías para calificar como discriminación el que una persona sea motivo de despidos u hostigamientos por su tipo de cabello o peinado; en esos casos, la discriminación se sanciona con multas de hasta 250.000 dólares. @mundiario
