¿Por qué a Lisa Ann no le gustaba el ñu ni medirme el perímetro de la cabeza?

CAMMxHNUsAE2taA
Lisa Ann.

Yo aprendí mucho de las ferias de monstruos, así que te regalé el ñu de márnol que ahora contemplas agnóstica desde el diván. El cuadrúpedo siempre gana al bípedo.

¿Por qué a Lisa Ann no le gustaba el ñu ni medirme el perímetro de la cabeza?

Yo aprendí mucho de las ferias de monstruos, así que te regalé el ñu de mármol que ahora contemplas agnóstica desde el diván. El cuadrúpedo siempre gana al bípedo.

 

Yo aprendí mucho de las ferias de monstruos, así que te regalé el ñu de mármol que ahora contemplas horrorizada desde el diván. En Toney Ellis venden figuras antropomórficas más hermosas, pero lo que te atrae es la masculinidad divina del cuadrúpedo. Y no encontré mejor opción.

No queda nadie en el edificio. Alguien se ha molestado en activar la alarma de incendios y todos los ancianos, con sus pellizas de nutria asesinada, fluyeron hasta Oxford Street. Podría haberme cagado en sus antepasados ilustres, pero me has convencido de que permaneciera junto a ti, porque el ñu te desafía desde tu inconsciente colectivo, aunque no te atreves a deshacerte de él porque es un regalo similar a la última bolsa de vísceras. Qué triste realidad y, aunque el fuego fuese mentira, llevas tiempo sin salir, Lisa, Lisa Ann, porque los neutrinos se han aprovechado de tu cuerpo, han modelado tu fuselaje hasta extremos que el resto de las mujeres envidian.

Hoy, cuando me siente delante del ñu junto a ti, no me abraces y yo no te convenceré de que midas el perímetro de mi cabeza. No hay más que decir, salvo que la luna ha muerto bajo el umbral de los ansiolíticos. No me gustan las piruletas.

 

Comentarios