El divorcio con hijos, mejor de manera amistosa

Cuando dos personas se casan, lo hacen pensando que será para toda la vida, no obstante, no siempre hay finales felices. Lo cierto es que el divorcio es una buena herramienta para aquellos que quieren romper su unión matrimonial, si bien, hay que ser cuidadosos, con el fin de evitar que el proceso sea doloroso, especialmente cuando hay hijos de por medio. 

Hay quienes piensan que un divorcio con hijos es mucho más complicado, sin embargo, si se hace todo de mutuo acuerdo y de mano de abogados expertos, no debe haber ningún problema al respecto.

¿A qué acuerdos llegar?

Como es lógico, los acuerdos a los que lleguen los cónyuges dependen de las necesidades de cada uno, si bien, el principal objetivo siempre debe ser que los hijos no sufran y darles las mejores soluciones al respecto.

Como ya se ha mencionado, para que la separación afecte lo menos posible a los hijos, es esencial que se plantee un divorcio de mutuo acuerdo. De esta forma, se garantiza que se darán los problemas mínimos para romper el vínculo, y que los hijos estarán bien atendidos en todo momento.

Cuando se da un divorcio de mutuo acuerdo, el convenio regulador cobra especial protagonismo, ya que se trata del documento en el que se establecen todos los acuerdos a los que han llegado ambas partes para romper el matrimonio, no solo con carácter personal, también de cara al bienestar de los hijos.

Es importante tener en cuenta que este documento debe ser redactado por un profesional experto dentro de este sector, precisamente, por este motivo, siempre se aconseja contratar los servicios de abogados especializados en derecho de familia para estos casos. 

En la actualidad, uno de los mejores bufetes en España, sin duda, es Divorcionetas. Se trata de un despacho de abogados en Madrid que ofrece un servicio de asesoramiento a los matrimonios que quieren iniciar un divorcio. Proporcionan un servicio completo e integral, además de encargarse de cada caso de principio a fin. A todo ello hay que sumar que todas estas prestaciones las ofrecen de manera económica, ya que cuentan con una tarifa plana de 150 euros por persona.

Una vez que se haya contactado con los profesionales adecuados, llega el momento de redactar el convenio regulador. Pero, ¿qué se indica en este documento? Vamos a descubrirlo a continuación.

Custodia

Como bien es sabido, la custodia es la que indica cuál de los padres se va a quedar con los hijos, es decir, el que va a convivir con ellos. Dependiendo de cada caso, así se podrá delimitar que se queden con el padre o la madre, o bien, el hecho de llegar a una custodia compartida.

Visitas

En el caso de que se haya llegado al acuerdo de que una persona sea la encargada de tener la custodia, entonces habrá que establecer un régimen de visitas para el cónyuge que no la tenga, y de esta manera, que pueda ver a sus hijos con asiduidad. Aquí hay múltiples opciones, dependiendo de lo que pacten las partes, ya que el régimen de visitas se puede constituir por días, fines de semana, semanas, etc.

Vivienda

Otro punto a tratar en el convenio, es establecer quién va a hacer uso de la vivienda familiar. Normalmente, suele vivir en ella el cónyuge que tiene la custodia, junto con los hijos.

Pensión

También, en este documento se establece la pensión que hay que pagar por los hijos. En este caso, la pensión le corresponde a la persona que no tiene la custodia, y debe cubrir los gastos de alimentación o educación. En el caso de la pensión, también puede haber una pensión que no esté dirigida a los hijos, sino a la expareja. Esto ocurre cuando se determina que, tras la separación, existe un desequilibrio económico.