Renuncia un candidato a la presidencia de Francia para frenar a Le Pen

El de por sí agitado panorama electoral de Francia ha vuelto a sufrir un nuevo contratiempo inesperado. El candidato por el partido Movimiento Demócrata (MoDem), François Bayrou, ha decidido renunciar a su candidatura para forjar una alianza con el emergente Emmanuel Macron, quien se vislumbra como uno de los dos grandes favoritos para los comicios de esta primavera.

De esta forma, Macron da un serio golpe al conservador François Fillon, envuelto en serios problemas personales con la ley y con quien apuntaba a competir por acompañar a Marine Le Pen a la segunda vuelta de los comicios. Según sondeos recientes, Macron y Fillon están separados por apenas tres puntos, por lo que el que termine ganando ese pulso bilateral terminará haciéndose con el poder del Elíseo, toda vez Le Pen no contaría con apoyos suficientes contra ninguno de sus potenciales rivales.

Pero las encuestas aun así no son claras. Mientras una le da el primer lugar al jefe del partido En Marche! (Macron), la otra se lo da al aspirante por Les Républicans (Fillon). En las últimas semanas Fillon ha empezado a recuperar parte del terreno perdido por el escándalo de los contratos que dio a su esposa cuando era parlamentario. Esta alianza propuesta por el MoDem, un partido que aglutina parte de la izquierda y derecha clásicas, es un gran catalizador para la campaña de Macron, quien obviamente aceptó la propuesta casi en el acto.

Bayrou ha fundamentado su decisión en la situación "de riesgo extremo" que vive su país. "Hay que cambiar las cosas y hay que hacerlo con urgencia", apuntó para luego agregar que la mejor persona para lograr ese cambio era el exjefe de la cartera de Economía, a quien no olvidó de mencionar que hasta hace poco era apoyado por los "grandes intereses financieros", según recoge El País. Según el veterano candidato (65 años), el especto de Le Pen y del Frente Nacional fuerzan a los políticos a mantenerse unidos. "La multiplicación de propuestas crea una confusión absoluta", aseguró. A favor del Frente Nacional juega el alto porcentaje de indecisos, que según el medio español es de un 26%, así como un igualmente alto porcentaja de posibles abstemios.

Bayour se comunicó con Macron la semana pasada y volverá a hacerlo mañana jueves, aunque aclaró que de momento no han dialogado sobre una candidatura conjunta, es decir, Macron en la presidencia y él como primer ministro, mas sí sobre un proyecto en común. Según prosigue El País, lo más probable es que los altos mandos del MoDem tomen puestos de salida en las legislativas de medio año. Eso sería también un impulso para un partido que tiene apenas dos diputados y seis senadores.

El jefe del MoDem demandó la creación de una ley para regular la moral de los funcionarios públicos, una alusión especialmente para Fillon y Le Pen, quienes son investigados por corrupción. La agrupación de Macron ha dado su palabra de elaborar esta iniciativa. A la vez, ha asumido la responsabilidad de mejorar el poder adquisitivo de los más desfavorecidos, prosigue El País. Aparte, se comprometió a introducir dosis de proporcionalidad en la ley electoral, lo cual permitirá subir el número de diputados al Legislativo. A día de hoy tiene 577 escaños debido al boicot que pasan todos los grandes partidos como parte del pacto de la república.

Esta no es la primera vez que Bayrou se ofrece a inclinar la balanza. En 2012 ya facilitó el triunfo del actual mandatario François Hollande, que le ganó la partida al entonces presidente Nicolas Sarkozy por un 3%. En aquel entonces, Bayrou había obtenido el 9% de los votos en la primera ronda. A día de hoy, cuenta con un 6% a las puertas de la primavera.

El jefe del MoDem siempre dejó claro que no correría por su cuenta para el Palacio del Elíseo. Por ejemplo, hace unos meses apoyó públicamente la candidatura de Alain Juppé en las primarias de Les Républicans. Pero Juppé terminó siendo derrotado por Fillon. La respuesta de Bayrou fue clara: era "imposible" forjar alguna alianza con el exministro.

Entretanto, Fillon también ha movido fichas para no acudir solo al combate con Macron. Recientemente, el candidato republicano, quien en su mismo partido ha recibido quejas y demandas de renuncia, pactó una alianza con la Unión de Demócratas Independientes, que cuenta con 27 diputados, todos cortesía de un tratado que firmaron precisamente con los republicanos hace cinco años.

Macron también se ha ganado la bendición de François de Rugy, aspirante interino de los izquierdistas de su país.