Pedro Antonio Sánchez evade responsabilidades en su primera audiencia como imputado

Pedro Antonio Sánchez. / Twitter
Pedro Antonio Sánchez. / Twitter

El todavía presidente de Murcia culpó a los técnicos de esa municipalidad durante su primera audiencia como imputado por el caso de las irregularidades en la tramitación del Puerto Lumbreras.

Pedro Antonio Sánchez evade responsabilidades en su primera audiencia como imputado

Pedro Antonio Sánchez pasó de toda responsabilidad en las irregularidades en la tramitación de Puerto Lumbreras cuando fungía como alcalde de la región y por el que ha sido imputado recientemente bajo los delitos de prevaricación, malvesarción de caudales públicos, fraude y falsedad en documentos públicos, escribió eldiario.es.

Sánchez acudió a su primer interrogatorio como imputado en este escándalo. El medio La Verdad, asegura que el todavía presidente del Ejecutivo de Murcia pasó de responsabilizarse y acusó a los técnicos municipales al tiempo que protestó que los seis millones de euros de subvención otorgada por el Gobierno de Murcia para la tramitación de Puerto Lumbreras terminaron en las obras del edificio cuya construcción nunca se concluyó. El Tribunal Supremo busca determinar el paradero de ese dinero puesto que, de acuerdo a lo averiguado hasta ahora, el presidente murciano optó por recurrir al fondo de proveedores habilitados por el Gobierno central para compensar a las compañías.

Sánchez, quien dio su palabra de que renunciaría a su puesto si era imputado, admitió ser el “impulsor político” del auditorio de Puerto Lumbreras aunque aseguró que lo hizo siguiendo las especificaciones de los técnicos y que fueron ellos quienes no dieron el aviso sobre las irregularidades. El jefe del Ejecutivo murciano reiteró hasta el cansancio el mismo argumento para defenderse de las acusaciones.

“De lo que estamos hablando es del PSOE que denuncia una obra hace diez años en Puerto Lumbreras. Y se ha acreditado por parte de los técnicos, de los distintos departamentos municipales y las pruebas periciales, que Puerto Lumbreras recibió dinero para hacer una obra a través de un proyecto modificado y lo invirtió. Nadie discute que el dinero se ha invertido en la obra. Incluso el perito del fiscal lo dice. ¿Puede haber algún error administrativo de la obra?, pues eso se está investigando. Lo importante es que se da una subvención y el 100% está en la obra. La obra que se hace tiene el valor de la inversión, lo hecho tiene un importe que coincide con el dinero que se subvenciona. ¿En el expediente hay alguien que ha cometido algún error administrativo? Pues que se investigue”, expresó Sánchez a la salida del Tribunal Superior de Justicia. De paso, el presidente ha arremetido contra el PSOE, uno de los principales promotores de la denuncia que enfrenta, y contra Podemos, aliados de los socialistas en una potencial revuelta, y avisó que no dejará su puesto por ninguna razón, pese a que previamente se había comprometido a hacerlo. Posteriormente confirmó que siempre sí dará un paso al costado si al final el Tribunal Superior lo imputa “formalmente” al escuchar todos sus argumentos.

El jefe del Ejecutivo murciano intenta saltarse el proceso que dicta el Superior para una investigación penal en la que la fiscalía y la jueza instructora han detectado varios indicios en su comportamiento de cuatro delitos “muy graves”, presenta eldiario.es.

Aparte, en la investigación del caso Auditorio, en el que le acompañan otros 19 individuos como imputados, se intenta determinar si el concurso por el que se adjudicó la obra está amañado, redacta eldiario.es

A todo esto, a las afueras del Tribunal Superior los otros partidos reforzaban sus demandas de renuncia sobre el presidente. Albert Rivera condicionó su apoyo a una nueva investidura de Mariano Rajoy que todos los cargos imputados renunciaran a sus puestos. El jefe de C’s ha dado su palabra que su grupo apoyará  a cualquier sustituto que proponga el PP en tanto no esté involucrado en ningún caso de corrupción. Si la situación se sale de control, los naranjas optaría por unirse a la moción de censura promovida por el PSOE o por llamar a elecciones anticipadas.

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