López Obrador mantiene el liderazgo antes de las elecciones presidenciales en México
Con las próximas elecciones presidenciales en el horizonte, el candidato izquierdista de México, Andrés Manuel López Obrador, sigue liderando las encuestas.
Una encuesta reciente de la firma encuestadora Buendía & Laredo, mostró que el 40 por ciento del país apoya a Andrés Manuel López Obrador alias AMLO, lo que significa un aumento de siete puntos en comparación con la encuesta anterior. Sin embargo, no todas las estadísticas han sido favorables para el presidente del partido Movimiento Regeneración Nacional, ya que el 37 por ciento de los encuestados en otras consultas han manifestado que tienen sus reservas respecto al candidato.
Por otro lado, Ricardo Anaya, presidente del conservador Partido de Acción Nacional (PAN) fue reconocido por el 67 por ciento de los encuestados, el 21 por ciento dijo que tenía una opinión positiva de él, mientras que el 27 por ciento dijo que tenía una opinión negativa de él, lo que representa un aumento del seis por ciento en comparación con la encuesta anterior.
Este proceso electoral mexicano ha sido un tanto atípico, ya que quién representará al Frente Ciudadano para México, una alianza entre el PAN, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Movimiento Ciudadano (MC), aún no está claro. Sin embargo, Ricardo Anaya, Rafael Moreno Valle y Miguel Ángel Mancera son los principales candidatos potenciales.
El gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) se aferra al actual Secretario del Interior: Miguel Ángel Osorio Chong se ha posicionado entre 21 y 23 puntos por encima de su contendor más cercano. Sin importar el resto de los partidos, la realidad es que en todos los escenarios AMLO sigue a la cabeza. Si las elecciones presidenciales fueran hoy, lo más probable es que fuese elegido.
El liderazgo de AMLO es alarmante para las instituciones financieras nacionales e internacionales, así como para los observadores de Washington, dada su postura antiestadounidense y la falta de claridad en torno a sus propuestas económicas concretas. México podría ver a su sistema político dividirse en el 2018. Si López Obrador alcanza una pluralidad de votos y muchos otros partidos e independientes dividen el resto, el presidente tendría un mandato débil y de cuestionable legitimidad.
Esto significaría seis años de estancamiento político en el mejor de los casos y un fracaso del sistema en el peor de ellos. @mundiario
