EE UU revisará su política hacia Cuba bajo la Administración Biden

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, junto a la vicepresidenta, Kamala Harris, en la Casa Blanca. / @POTUS Twitter
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, junto a la vicepresidenta, Kamala Harris, en la Casa Blanca. / @POTUS Twitter
"Nuestra política hacia Cuba está guiada por el apoyo a la democracia y los derechos humanos, eso estará en el centro de todos los esfuerzos de EE UU", dijo este viernes la Casa Blanca.
EE UU revisará su política hacia Cuba bajo la Administración Biden

Tiempos de cambios diplomáticos han llegado a la Casa Blanca. La mayor potencia mundial necesita y busca bajar la tensión con un país que, si bien no es y probablemente nunca sea su aliado, debe mantener a raya por su influencia política en crisis extremadamente graves como la de Venezuela, pero también por la opresión que el régimen comunista que gobierna esa pequeña isla mantiene sobre su población. 

Es por ello que el nuevo Gobierno de Estados Unidos anunció este viernes que está dispuesto a cambiar la política de Washington hacia Cuba, según ha informado la Casa Blanca este jueves. Se trata de un hito mediante el cual podría haber un cambio sustancial en las medidas de la potencia norteamericana con respecto a la isla, que desde hace 50 años sufre un embargo económico-comercial impuesto por EE UU tras la crisis de los misiles entre la Unión Soviética con Cuba como aliado y el para entonces gobierno de John F. Kennedy. 

Después de una estela de decretos con los que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, busca revertir los daños del legado de su predecesor Donald Trump, este anuncio llega en la segunda semana en el poder del mandatario demócrata. La Administración Trump salió del poder con una decisión que enviaba un claro mensaje: ‘EE UU no tolerará a los regímenes totalitarios que oprimen a sus población’, por lo cual en los últimos días de su mandato el expresidente republicano anunció la inclusión de Cuba en la lista de los países patrocinadores del terrorismo, así como también había ordenado en noviembre la suspensión de las remesas de EE UU a Cuba junto con el cese de las operaciones de la casa de cambio Western Union en la isla, un canal de recepción vital para los cubanos que dependen del dinero de sus parientes que trabajan en territorio estadounidense. 

Este gesto diplomático por parte de Biden, que libera un poco la tensión acumulada entre Washington y La Habana durante los últimos cuatro años, podría ser el preludio de un retorno a la política de deshielo de Barack Obama, pero probablemente no implique oxígeno político ni económico para el régimen cubano, pues está lejos un levantamiento del embargo mientras Biden no vea intenciones reales del Gobierno de Miguel Díaz-Canel, tutelado por Raúl Castro, de cesar la opresión social y económica a la población cubana, sumida en la miseria y la pobreza desde hace décadas.


Quizás también te interesa:

La economía de EE UU cayó en 2020 a niveles de la Segunda Guerra Mundial


“Nuestra política hacia Cuba está guiada por dos principios. Primero, el apoyo a la democracia y los derechos humanos, eso estará en el centro de todos nuestros esfuerzos. El segundo es que los estadounidenses, especialmente los cubano-estadounidenses, son los mejores embajadores de la libertad en Cuba. Así que revisaremos las políticas de la Administración Trump”, ha dicho este jueves la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, en su conferencia de prensa diaria.

Aunque Cuba desestabilizó indirectamente durante años a EE UU en medio de la tensión internacional por la Guerra Fría, bajo el dominio de la Unión Soviética, la exclusión del régimen cubano como un Estado patrocinador del terrorismo -decisión respaldada en presuntos informes de la inteligencia norteamericana- podría ser el primer paso hacia una reapertura de las relaciones entre ambos países, pero sin la falsa expectativa de un levantamiento del bloqueo, que la dictadura cubana trataría de capitalizar políticamente para su beneficio de perpetuarse en el poder, mas no para aliviar a la población civil. @mundiario

Comentarios