Las cumbres europeas ya fracasan incluso con muertos encima de la mesa

Mark Rutte y Angela Merkel. / Mundiario
Mark Rutte y Angela Merkel. / Mundiario

La Alemania del siglo XXI se olvida de que su milagro económico se debió en parte al impago reiterado de sus deudas por indemnizaciones de guerra en el siglo XX. Ahora el Gobierno de Berlín se resiste a prestarle apoyo a la iniciativa de Francia, Italia y España, tres países en apuros.

Las cumbres europeas ya fracasan incluso con muertos encima de la mesa

El plan de choque europeo ante la crisis económica desatada por la expansión del coronavirus se aplazó al menos 15 días por la resistencia de Alemania y Holanda. Las cumbres europeas ya fracasan incluso con muertos encima de la mesa. España, con el apoyo de Italia y de otros siete países, solo logró que las negociaciones se reanuden, una vez que el Eurogrupo vuelva a estudiar la situación. Todo pinta bastante mal, ya que si Alemania no cede ante la propuesta de los coronabonos, poco hay que hacer. Con el apoyo de Francia, no basta.

El principal escudero de la canciller alemana Angela Merkel es el ministro holandés de Finanzas, Wopke Hoekstra. Esta vez además se ha lucido, al sugerir que la Comisión Europea debería investigar por qué algunos países –se refiere, sin citarlos, a Italia y España, básicamente– no disponen de margen presupuestario, a pesar de que la eurozona lleva siete años de crecimiento ininterrumpido, el periodo más largo de bonanza desde el nacimiento de la moneda única en 1999.

Wopke Hoekstra se le ha olvidado un pequeño detalle: investigar de paso a la Alemania del siglo XX, cuyo milagro económico se debió en parte al impago reiterado de sus deudas por indemnizaciones de guerra en el siglo XX. ¿Qué tal si estudiamos también todo eso con la objetividad que caracteriza a Bruselas? Por lo demás, el reproche –razonable– sobre el aumento de la deuda pública en España e Italia también habría que hacérselo a la propia Comisión Europea, al FMI y, por supuesto, a los jefes de Gobierno de Italia y de España entre 2008 y la actualidad. Tanto por haberla disparado con sus políticas neoliberales como por no haberla reducido cuando hubo margen.

Las deudas que Alemania no pagó en el siglo XX fueron contraídas por haber invadido, destruido, saqueado y matado, según acreditan las sentencias de la época, condenatorias para Alemania. El escudero Wopke Hoekstra, que pelotea a Angela Merkel, haciéndole el trabajo sucio, tal vez se confundió con sus pretendidas lecciones de moral.

Como buenos demócratas, Wopke Hoekstra Angela Merkel tampoco deberían olvidar que el grupo de países partidarios de mutualizar la deuda pública en Europa –el encabezado por Italia, España y Francia– representa casi la mitad de la población de la Unión Europea. Por decirlo todo, también el 72% de la deuda de la eurozona. 

El Gobierno alemán de Angela Merkel y el holandés de Mark Rutte saben que Italia, con una deuda que supera el 100% del PIB, y España, con una deuda cercana al 100% del PIB, apenas tienen capacidad de elevar su endeudamiento no mutualizado. Pero prefieren mirar para otro lado. Incluso se burlan, ya que solo así cabe entender su invitación a los gobiernos español e italiano a acogerse a la suspensión temporal del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que fijaba un límite del 3% del déficit público, porque eso es justo lo que pueden hacer Holanda y Alemania, con margen de maniobra fiscal, pero no España e Italia. @mundiario

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