Fracaso de las izquierdas españolas en la defensa de las libertades ciudadanas

Manifestación en Madrid contra la reforma de la 'ley mordaza'. /  @jucilnacional
Manifestación en Madrid contra la reforma de la 'ley mordaza'. / @jucilnacional

Las izquierdas españolas no han podido ni sabido ni querido derogar la "ley mordaza", ni la prisión permanente revisable ni tampoco el delito de injurias a la Corona, con lo que han demostrado su falta de compromiso con las libertades. 

Fracaso de las izquierdas españolas en la defensa de las libertades ciudadanas

No fue posible. Otra vez PSOE y Unidas Podemos rechazaron sumar con las fuerzas de la mayoría de la investidura y fracasó la reforma de la ley de seguridad ciudadana que derogaría la “ley mordaza”. Um engendro legislativo impuesto por la mayoría absoluta del PP en el 2015 que limitó sustancialmente los derechos fundamentales de libre expresión, reunión y manifestación y el derecho de asilo.

Recordemos los antecedentes históricos. La apoteosis de reivindicaciones sociales, económicas y políticas en la calle desde el 11-M de 2011, que puso de relieve la gravísima crisis del llamado pacto de la transición y que, sin embargo, no generó graves trastornos de la convivencia cívica en la calle. Y una mayoría absoluta del PP que decidió normativizar herramientas contrarias a la tradición liberal y democrática de las democracias europeas para desincentivar las demostraciones públicas en la calle y la libertad de expresión frente a los agentes de los cuerpos de seguridad.

El PSOE, a la vez que IU y Podemos, prometieron derogar esta reforma tan pronto les fuese posible. Pero la coalición de las izquierdas españolas lleva ya en modo de gobierno  tres años y dos meses y durante todo este tiempo no fueron capaces de cumplir su promesa. Y, cuando tenían la posibilidad de hacerlo ( en el Congreso estatal hace pocos días) mostraron su miedo a las reacciones de la derecha española y del corporativismo de las organizaciones sindicales policiales Jucil y Jupol y rechazaron incluir en la reforma cuatro contenidos fundamentales: i) la prohibición del uso policial de las pelotas de goma y de otro peligroso material en las demostraciones públicas, ii) la proscripción de las devoluciones en caliente de personas que intentan atravesar las fronteras, práctica inhumana que atenta contra el derecho de asilo, iii) suprimír la presunción de veracidad del relatorio fáctico de los atestados policiales para actuaciones administrativas y juicios posteriores y iv) la exigencia de que el funcionariado policial justifique objetivamente los hechos que motivan las acusaciones por faltas de desobediencia o respeto a la autoridad policial.

En una democracia liberal avanzada se deben interpretar expansivamente las libertades de expresión y libre reunión y manifestación públicas. Los Cuerpos policíales están para garantizar el libre ejercicio de nuestros derechos, fundamentalmente de los derechos fundamentales y libertades públicas y, por tanto, deberían de exigir de los Ejecutivos y Legislativos medios materiales y humanos suficientes y normativa apropiada para cumplir su finalidad y protegernos, no para limitar nuestros derechos. A pesar de todo, es justo reconocer que son amplia mayoría las personas integrantes de estos Cuerpos que saben ésto y solo una minoría, activada desde las derechas radicales españolas, la que pide herramientas propias de las policías china, iraní o saudíta.

Pero en esta legislatura ya no será posible. Como tampoco la derogación de la pena de cárcel permanente revisable o del delito de injurias a la Corona. Un grave fracaso de las izquierdas españolas. @mundiario

 

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