Telefónica registró en enero su mayor aumento en la Bolsa

El presidente de Telefónica, José María Alvarez-Pallete. / Mundiario
El presidente de Telefónica, José María Alvarez-Pallete. / Mundiario
A pesar de este importante éxito, y el presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, enfrenta el reto de mantener su base de inversionistas en la compañía.
Telefónica registró en enero su mayor aumento en la Bolsa

Telefónica sigue creciendo. Una de las compañías líderes en inversión dentro del amplio mercado de las telecomunicaciones en España sigue creciendo como el gran actor de la industria telefónica nacional y del resto de Europa. Pero sin duda, ya es uno de los grandes imperios de las telecomunicaciones en Occidente.

Y es que Telefónica SA registró en enero su mayor repunte en la Bolsa de Valores en seis años después de cerrar la venta de sus torres de telefonía móvil esta semana por 7.700 millones de euros (US$9.400 millones). Consiste en una estrategia con la que esta empresa amplió su capitalización de mercado con el objetivo de generar una cartera de dividendos que pueda destinar nuevas colocaciones de liquidez a largo plazo. 

A pesar de este importante éxito, Telefónica aún se encuentra muy por detrás de sus rivales, y el presidente ejecutivo, José María Álvarez-Pallete, enfrenta una serie de desafíos más apremiantes para mantener el apoyo de sus nuevos inversionistas. La idea es que los tenedores de capital sigan apostando por Telefónica como el gran captador de casi toda la demanda de servicios de telefonía en España y América Latina.

El primer reto es la venta de la mayoría de las divisiones de bajo desempeño de Telefónica en América Latina. Las sucursales que no generan rentabilidad sostenible en países como Venezuela, Colombia y Uruguay, podrían ser vendidas por la junta directiva para no incurrir en un déficit financiero de gran escala. Esa movida no se ha ejecutado porque “la pandemia ha devastado las economías y desanimado a los potenciales compradores”, según personas familiarizadas con las negociaciones, de acuerdo con El País. 

“Los esfuerzos por atraer nuevos inversionistas a las empresas de tecnología de Telefónica también están demostrando ser un desafío mucho mayor de lo previsto”, señalaron. Esto implica que donde no haya garantías de rentabilidad en medio de la caída de la demanda global por la recesión derivada de la pandemia, tampoco habrá empresarios dispuestos a arriesgar su capital. @mundiario

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