Nueva Pescanova presume de beneficios con cifras ridículas al lado de las de Pescanova
Amparada en su condición de sociedad limitada, la empresa que dirige Ignacio González –su consejero-delegado– practica el oscurantismo, lo que impide saber si cumple realmente los objetivos de su plan de negocio. Hay preguntas que tendrá difícil eludir en 2020.
Ignacio González presume de beneficios en Nueva Pescanova pero sus cifras son todavía ridículas al lado de las de Pescanova en los buenos tiempos de Alfonso Paz Andrade y Manuel Fernández de Sousa.
En el peor de los casos para Fernández, de 36,8 millones de euros frente a los 5,4 millones de ahora de González. Obviamente, sí mejora los tiempos de pérdidas de 180 millones, ya en plena debacle de la pesquera de Redondela bajo la presidencia de Manuel Fernández, ya sin Alfonso Paz Andrade.
Nueva Pescanova practica el oscurantismo, amparada en su condición de sociedad limitada, lo que impide saber si cumple realmente los objetivos de su plan de negocio.
Las preguntas son obligadas en función de su propio plan de negocio: ¿Sus ventas están por encima de los 1.200 millones de euros? ¿Superó los 100 millones de euros de ebitda? ¿Obtendrá en 2020 los 140 millones de euros previstos en beneficios?
La banca ha sido generosa con Nueva Pescanova –y con su gestor– pero al menos el Banco Sabadell, cotizado en Bolsa, necesitará justificar tanta comprensión ante su junta de accionistas. No como otros, entre ellos Ignacio González, consejero-delegado de Nueva Pescanova. @mundiario
