La NASA hace historia en Marte: Perseverance produce oxígeno respirable

Perseverance. / NASA.
Perseverance. / NASA.
El vehículo ha logrado fabricar la cantidad suficiente de oxígeno (a partir del dióxido de carbono del planeta rojo) para que un astronauta pueda respirar durante 10 minutos.
La NASA hace historia en Marte: Perseverance produce oxígeno respirable

El histórico vuelo del helicóptero Ingenuity de la NASA ha acaparado todas las portadas esta semana, pero la agencia espacial estadounidense ha conseguido otro impresionante hito en la carrera por conquistar Marte: el rover Perseverance ha logrado convertir dióxido de carbono marciano en oxígeno respirable.  

Estados Unidos se ha convertido en el primer país que consigue producir oxígeno respirable en otro planeta, gracias a un aparato llamado Moxie (Mars Oxygen In-Situ Resource Utilization Experiment), que está instalado en las entrañas del vehículo de exploración de última generación que aterrizó en superficie marciana en febrero.

La NASA ha explicado que el dispositivo logró producir el 20 de abril unos cinco gramos de oxígeno, una cantidad suficiente como para que un astronauta pudiese respirar durante 10 minutos. Pero la verdadera hazaña es que ha confirmado que es posible producir oxígeno para trabajar de manera sostenible en Marte... y algo más: que los humanos poseen herramientas para generar oxígeno en otro mundo.

 

¿Por qué es tan importante este logro?

La atmósfera de Marte es irrespirable, ya que está compuesta en un 96% de dióxido de carbono tóxico. Moxie ha sido diseñado para absorber ese dióxido de carbono y romperlo en su interior, por medio de un proceso de electrolisis a unos 800 grados, en el que produce moléculas de oxígeno prácticamente puro y como desecho principal monóxido de carbono.

La agencia espacial ha detallado que su objetivo principal es utilizar dicho oxígeno como combustible para los cohetes de vuelta a la Tierra, aunque también tiene en mente una posibilidad mucho, mucho, pero mucho más ambiciosa: usarlo para que los futuros astronautas en Marte puedan respirar.

“Algún día esperamos enviar gente a Marte, pero tendrán que llevarse un montón de cosas con ellos”, ha dicho Michael Hecht, investigador principal del proyecto. “Lo más importante de todo sería un enorme tanque de oxígeno de unas 25 toneladas”, añade, sobre la cantidad necesaria para que un cohete pueda regresar a la Tierra. Además, precisaría otras siete toneladas de otro combustible, que podría ser metano. “Una opción es generarlo a partir del hidrógeno del agua helada que hay en el subsuelo marciano y el dióxido de carbono atmosférico”, agrega Jorge Pla-García, investigador del Centro de Astrobiología (CAB) en Madrid y miembro de la misión de la NASA en Marte. “Esa agua helada podría servir para beber, regar los cultivos y fabricar combustible”, detalla. “Hay que tener en cuenta que el coste de llevar al espacio un kilo de material es aproximadamente de un millón de euros, con lo que todo lo que podamos utilizar in situ es bienvenido”. @mundiario
 

Comentarios