Las claves sobre el nuevo diálogo entre el chavismo y la oposición venezolana
El chavismo y la oposición venezolana reanudarán el diálogo en México. La reunión entre representantes de Nicolás Maduro y de Juan Guaidó, con la intermediación del Gobierno de Noruega, genera una nueva expectativa para buscar una salida a la grave crisis política en la que está sumergida el país caribeño en los últimos años.
Como se sabe, el último intento de diálogo entre estas fuerzas ocurrió en Barbados en 2019 donde, en medio de la euforia política que desató el reconocimiento de la comunidad internacional hacia Guaidó como presidente interino de Venezuela, Noruega auspició, como ahora, un “diálogo de paz” para desbloquear la crisis.
Sin embargo, los avances que habían en ese momento quedaron disueltas tras la decisión de Maduro luego de que el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó congelar los activos de su gobierno en su país. Esto provocó que el chavismo abandonará el diálogo y volvieron a la estrategia de persecución contra la oposición para tener el control absoluto de Venezuela.
Ahora la cita será en México, que tiene al gobierno de Andrés Manuel López Obrador como mediador. “Nosotros hemos aceptado porque buscamos el diálogo”, dijo el presidente durante el anuncio. Las sesiones de trabajo comenzarán este viernes y tendrán una nueva ronda de conversaciones a finales de mes, en la cual se aspira a tocar los aspectos más delicados.
Al respecto hay algunas claves sobre este tema.
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ELECCIONES Y SANCIONES
En esta nueva ronda de diálogo hay dos puntos esenciales: la convocatoria a elecciones regionales y locales, a realizarse el próximo 21 de noviembre, de forma transparente y el levantamiento de las sanciones.
El primer punto ha sido pedido por la oposición de Guaidó, quien observa la “necesidad” de abrir el camino para lograr la garantía de unos comicios regionales de forma “libres, justas, transparentes y verificables”. En concreto, lo que busca evitar es que no haya alguna influencia política del Consejo Electoral Nacional (CEN).
Esto se observo en las elecciones legislativas del año pasado cuando la autoridad electoral ayudó al régimen chavista para sacar del camino a la oposición que terminó por perder el control de la Asamblea Nacional, cuyo fundo era el último bastión para hacerle frente a Maduro.
Respecto al segundo punto, el chavismo desea que las sanciones que pesan en su contra sean levantadas. En su mayoría están provienen de Estados Unidos, donde la administración Trump tuvo un especial ofensiva política contra Maduro. Esto debilitó y agudizó la crisis en Venezuela.
Juan González, director para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad de EE. UU., ha reiterado que la administración de Joe Biden está dispuesta a ceder en el tema de las sanciones siempre y cuando vea una voluntad creíble y el cumplimiento de compromisos por parte del régimen de Maduro.
EXPECTATIVA A MEDIDAS
Sin embargo, más allá de este nuevo acercamiento, en Venezuela no hay mucho optimismo de lo que salga entre el chavismo y la oposición.
El 51% de la población ve con buenos ojos este cuarto intento en seis años para lograr un acuerdo que permita salir al país de la terrible crisis económica y social que le aqueja, según una encuesta de Dataincorp.
Según El País, el director de la firma demoscópica Delphos, Félix Seijas, asegura que la mayoría de los venezolanos quiere “salidas pacíficas, no quiere violencia y sabe el costo que eso puede tener”.
Sostiene que, aunque la mayoría ve con buenos ojos el diálogo, “tiene claro que el Gobierno de Maduro es más fuerte y tiene ventaja. Esa desigualdad de condiciones fundamenta el pesimismo de muchas personas.”
Como se ve, hay expectativa de que el chavismo y la oposición llegue a un acuerdo para acabar con una crisis que afecta a los venezolanos. @mundiario
