3 lecciones que Simone Biles nos enseñó sobre salud mental
Probablemente no tengamos que decirte que Simone Biles es una de las gimnastas más impresionantes y talentosas de todos los tiempos, pero, por si acaso, aquí hay un recordatorio: es la gimnasta estadounidense más condecorada del Campeonato Mundial, con 30 medallas a su nombre. Fue la primera gimnasta en ganar tres títulos mundiales consecutivos y fue la primera mujer estadounidense en ganar tres títulos nacionales completos en 23 años.
Simone Biles nos recuerda que la aptitud mental es vital
Su decisión de retirarse de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 para concentrarse en su salud mental sorprendió a todos y, probablemente ella se haya sorprendido a sí misma. Este evento inesperado nos hizo pensar en lo valiente que fue al alejarse, incluso en momentos de gran recompensa.
No obstante, la superestrella de gimnasia decidió destacar la importancia del cuidado personal y los límites. Nos enseñó que es esencial identificar cuándo tolerar algunas molestias y cuándo es más saludable tomar un descanso, ya sea físico o mental.
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A continuación, tres lecciones que nos enseñó Simone Biles sobre salud mental para perfeccionar este tipo de autoconciencia:
1. Identificar el umbral de tensión positiva
Los practicantes de yoga a menudo describen el "punto de tensión agradable" como el momento en un estiramiento de yoga en el que se esfuerzan para sentir una sensación de ardor en los músculos, pero no es tan malo que estemos a punto de rompernos algo. Este es el momento en el que es probable que experimentemos los efectos más óptimos de la práctica de yoga.
Para ayudar a identificar el punto de tensión agradable en el cuerpo o en la mente, lo recomendable es recordar momentos en los que realmente nos hemos esforzado. Debemos observar cuándo funcionó bien y cuándo nos agotamos.
2. Evaluar si el objetivo que perseguimos todavía nos importa
Es importante acudir a un especialista para evaluar nuestros sentimientos más de cerca, pues es posible que estemos ejerciendo una increíble cantidad de autodisciplina en un objetivo que probablemente rinda más frutos en otro que sí nos importa de verdad. Una vez aclarado, podremos comenzar a orientar nuestro impulso y energía hacia ese objetivo.
3. Practicar el cuidado personal
Mucha gente motivada posee una habilidad asombrosa para "jugar a través del dolor". Podemos ser un atleta que se pone un vendaje y bloquea mentalmente su lesión para ganar un trofeo, o un profesional consumado que hace a un lado los compromisos personales, abrirnos camino a través de obstáculos es admirable hasta cierto punto.
No debemos olvidar que los sentimientos existen. La clave entonces, es tomarnos un tiempo antes y/o después de los eventos estresantes para considerar el costo emocional que causan. Observar qué emoción nos generan estos eventos, nos servirá para crear un plan de cuidado personal para abordarlos.
Los planes de cuidado personal podrían ser reservar un masaje y tomar una semana libre del gimnasio o planificar un día de “solo chicas”. El punto es asegurarnos de no concentrarnos tanto en el objetivo y valorar que superamos los obstáculos temporales.
La clave es saber que no hay nada de malo en querer ser un campeón y está totalmente bien hacer algunos sacrificios a veces si queremos ser los mejores en nuestro campo. Al mismo tiempo, estaremos mejor equipados para el éxito sostenible si sabemos cómo practicar un cuidado personal a lo largo del camino y cuándo cambiar de rumbo por completo. @mundiario
