En marcha Las Meninas de Canido 2018: La gran fiesta gallega de Urban Art
MUNDIARIO ha seguido Las Meninas de Canido desde sus comienzos. Un movimiento vecinal que se ha convertido en uno de los certámenes de urban art más importantes de Europa. María Fidalgo, una de las críticas de arte más leídas del país, anuncia su próxima edición los días 31 de agosto, 1 y 2 de septiembre y repasa sus orígenes.
En 2008 Eduardo Hermida, como Luther King, tuvo un sueño. Soñó con una unión mística y física entre las artes y los vecinos de Canido, su barrio, una de las zonas históricas con más arraigo y solera de la ciudad de Ferrol, pero también en grave proceso de deterioro y pérdida de identidad.
Este sueño de Hermida daría lugar a uno de los eventos artísticos más interesantes y emocionales que jamás nadie hubiera imaginado: Las Meninas de Canido. Hoy ha traspasado fronteras, se estudia en universidades, es Itinerario Cultural europeo y cumple diez años de vida más vivo y espléndido que nunca.
Un fenómeno que ha conseguido no sólo ser uno de los eventos de urban art más importantes de Europa, sino revitalizar el barrio- que hoy resurge con un comportamiento demográfico y un desarrollo muy superior al resto de la ciudad- y se ha convertido en una pinacoteca mutante y en una seña de identidad de la ciudad.
El origen de Las Meninas de Canido
El desencadenante del proceso fue la destrucción de un mural ejecutado por el pintor Jorge Cabezas en una casa del barrio.
Hermida y su pequeña hija Estrella Hermida, como protesta y en solidaridad con el artista agraviado, decidieron pintar en una fachada una Menina. Partiendo de este hecho, comenzó a organizar un evento artístico con ayuda de Avelino Castro. El modus operandi sería el de un certamen de pintura rápida, con la salvedad de que no habría premios, ni vencedores ni vencidos y los lienzos los conformarían las paredes y muros de Canido, un entorno urbano un tanto deslavazado pero que no ha perdido su sabor vecinal pese a la mezcolanza antinatural entre viviendas de planta baja y recientes promociones inmobiliarias.
La familia de Felipe IV, magna obra de Diego de Silva y Velázquez, y conocida popularmente como Las Meninas, fue el tema escogido como leit motiv del acontecimiento. Los secretos entresijos del lienzo en 1656, las distintas interpretaciones históricas y mitológicas, sumado a su potente fuerza icónica lo habían convertido en imán para ser reinterpretado hasta la saciedad por artistas contemporáneos, desde Picasso al equipo Crónica
Hermida eligió Las Meninas “porque se trata de un icono fácilmente revisable para los artistas y muy reconocible por parte de los ciudadanos”… Y aunque tal vez nunca lo hubiera pensado, el elegir el “cuadro más bello jamás pintado” como lo definieron los clásicos de entonces, actuaría también como mecanismo disuasorio de destrucción: la efímera gamberrada del grafftti se contrarrestaba con el rancio academicismo del símbolo del más grande entre los grandes. Las reivindicaciones urbanísticas y sociales del barrio se canalizaron a través de las ilusiones artísticas de Hermida gestando una performance colorista.
Hermida posiblemente nunca imaginó lo que conseguiría, ni lo que podría significar en un futuro: una experiencia creativa sin precedentes en el arte gallego, y que hoy se consolida como uno de los eventos de urban art más importantes del mundo.
Distintas ediciones
Acudieron a su primer llamamiento varias decenas de artistas de diferentes trayectorias, noveles y de renombre entre los que se encontraban entre otros los maestros González Collado - recientemente desaparecido, y Siro, Carlos Barcón, el escultor luso Manuel Patinha, Jorge Cabezas, Jorge Llorca, Suso Bastarrechea, Rafael Romero… En el maratón pictórico que duraría más de doce horas, los artistas se desplegaron desde primera hora, armados con material donado por el Concello ante la animosa presencia a pie de calle, y no sólo para hacerse la foto, de la concejala de cultura de entonces, Yolanda Díaz. La vecindad, sintiéndose siempre la pariente pobre del barrio de la Magdalena, olvidada de los grandes eventos ciudadanos, se volcó en el sorprendente proyecto ese día inesperado. El grupo de gaiteiros deleitaba con su música la ejecución de los pintores en esta nueva y sugerente ruta de las Meninas que iban siendo captados por artistas fotográficos. Los vecinos avituallaron con viandas caseras a todos aquellos que jamás pensaron ver ante sus puertas. El festival pictórico se prolongó con conciertos nocturnos.
David Pintor, Premio Mingote, en las Meninas 2015.
El todopoderoso El País, poco dado a cubrir los eventos ferrolanos, publicó una interesante reseña del acto y el hábil portal de ocio Trivago comenzaría a anunciarlo desde entonces como recorrido turístico de la ciudad de Ferrol.
Desde esta primera edición de 2008 ya tomaría forma definitiva este happening lúdico-festivo-artístico de Arte na Rua. As Meninas de Canido. El éxito fue tal que continuaron las ediciones y aparecieron entre los participantes personajes de renombre como García Alix, Menchu Lamas, Antón Patiño, David Pintor, Moncho Borrajo, Antón Reixa, Víctor Coyote, Rosario Sarmiento o el académico Xurxo Lobato, que todos los años comenzaría a realizar una gran creación fotográfica conmemorativa.
También fue aumentando el número de pintores, se unieron nuevas técnicas artísticas, cortometrajes, poesía, danza, una sección infantil, talleres, conciertos, Foodtrucks, proyecciones, y showcooking que convivirían con el gran leit motiv: el happening pictórico que da el nombre al evento y por el que ya han pasado unos 1.200 artistas procedentes de todo el territorio nacional y extranjero.
El artista Jorge Cabezas, Eduardo Hermida, el polifacético Antón Reixa y la crítica de arte María Fidalgo.
Han brotado en las paredes del barrio y en las fachadas de sus casas como "de la nada" Meninas iniciáticas como la naútica Menina de Collado o la de Siro, que desencadenó el duelo de titanes entre Velázquez y Picasso. También centenas de Meninas clásicas y poperas, naifs y académicas, hipervolumétricas y planas, rosalianas y peregrinas, patchworks y sintéticas, solas y acompañadas, serviles y libertarias, acuáticas, irreverentes, nacionalistas, monárquicas y republicanas, sílfides y obesas, barrocas y minimalistas, recortables, marineras, raciales, efímeras y eternas. Todas se ganaron su hueco en el corazón de todos.
Un ferrolano residente en París: Ignacio Fernández, presidente de la Asociación Eau et Lumiere, se convirtió en su valedor. Auspició la presentación pública del propio Eduardo Hermida ante el Consejo Europeo de Itinerarios Culturales y As Meninas superaron el primer filtro para convertirse en itinerario cultural europeo, un distintivo que reconoce el valor de determinados trayectos en una apuesta por la conservación del patrimonio, en el que las humildes Meninas de Canido compartirían un privilegiado listado entre los impresionistas franceses, la ruta de Mozart o el milenario Camino de Santiago.
Siro en Las Meninas.
El misterio Banksy
En la última edición de Las Meninas la prensa nacional (El País, La Vanguardia, ABC...) se hacía eco de que nada menos que las principales cabeceras europeas (The Times, The Daily Telegraph, La Republica, Le Parisien o The Guardian, entre otros) exhibían días un gran anuncio solicitando a Banksy –el artista urbano más reputado de Europa– su intervención en las Meninas de Canido, el perfomance artístico del pequeño barrio de una ciudad situada en el Finisterre peninsular (Ferrol).
El comunicado publicado, escrito en varios idiomas afirmaba que "el barrio de Canido ha reservado un espacio a Banksy, para que el emblemático artista de identidad desconocida también reinterprete la obra más emblemática de Velázquez". También apareció en varias vallas publicitarias de Londres y Bristol, ciudades donde se desarrolla la vida cotidiana de Banksy.
Durante el evento no apareció el artista esperado, pero meses después apareció una obra en esa pared con el personal estilo del artista. Una obra que jamás ha sido ratificada por el artista pero tampoco negada e incluso varios se han atribuído su paternidad. Sea o no, el misterio añade dotes de seducción a la visita del barrio. El mecenas que patrocinó la campaña fue Estrella Galicia, la rubia gallega más internacional que estaba lanzando su producto 1906. En la edición actual también colabora porque " aunque ha pasado de ser un movimiento vecinal a todo un fenómeno, su credibilidad sigue intacta, lo que confirma su autenticidad.
El misterioso "Banksy" de Canido.
Lo que empezó como un desafío vecinal se ha convertido en toda una epopeya que ya forma parte del imaginario colectivo de la ciudad. Un barrio que se mostraba decrépito y depauperado cuando se celebró el primer evento y que hoy se ha convertido en pinacoteca viva, bajo la única bandera de la más absoluta libertad creativa, y que cuenta con patrocinadores públicos y privados como el Concello de la Ciudad, la Xunta de Galicia, Gadis, Estrella de Galicia, la Empresa Rilo o Abanca, cuyos representantes respaldaron la rueda de prensa de la presentación de esta nueva edición.
Anxo Lorenzo, secretario xeral de Cultura de la Xunta; Eduardo Hermida, ideólogo del proyecto; Jorge Suárez, alcalde de Ferrol, y representantes de Abanca, Gadis, Estrella de Galicia y Rilo en la presentación.
Eduardo Hermida en la rueda de prensa de presentación de las Meninas 2018 fue contundente: “Cuando hace diez años comencé, en compañía de mi hija, a llenar de color esos muros sombríos y tristes, nunca pude imaginar que la acción de un artista enamorado de su espacio vital llegase a convertirse en un fenómeno sociocultural de la envergadura que tiene hoy. El sueño de un artista de conseguir un Ferrol mejor se ha cumplido.”.
En el Barrrio de Canido, en Ferrol, se celebrarán Las Meninas 2018 los días 31 de agosto, 1 y 2 de septiembre. @galiciamundiari
