Quién es Frances Haugen, la extrabajadora que filtró los 'Archivos de Facebook'

La antigua jefa de producto (que sacó a la luz una serie de investigaciones confidenciales de Facebook) comparece ante el Senado de EE UU para destapar las malas prácticas de la compañía.
Se llama Frances Haugen y su nombre ocupa los titulares en todo el mundo por una importante razón: es la extrabajadora que filtró los 'Archivos de Facebook' o Facebook Files, decenas de miles de documentos internos confidenciales que revelan las malas prácticas de la tecnológica y que son el centro de una investigación que The Wall Street Journal ha ido publicando por partes durante las últimas tres semanas.
Haugen, que solía trabajar como jefa de producto contra la desinformación cívica de Facebook, ha comparecido este martes ante los miembros del subcomité para la Protección del Consumidor y la Seguridad de los Datos para denunciar las prácticas “abusivas” por las que la firma ha apostado para “crecer a cualquier precio”.
Su testimonio es especialmente relevante hoy por dos razones: llega horas después del apagón que dejó al conglomerado de Zuckerberg (Facebook, Instagram y WhatsApp) fuera de funcionamiento durante unas seis horas este lunes… apenas un día después de que esta ingeniera informática desvelara su identidad en un horario de máxima audiencia en el programa de la CBS 60 Minutes. Haugen había filtrado, bajo anonimato, los documentos que consiguió antes de abandonar su trabajo en mayo de este año y no fue hasta este domingo que se atrevió a dar la cara.
“Mi nombre es Frances Haugen”, ha dicho al comienzo de su alocución en el Senado este martes. “Solía trabajar en Facebook. Me uní a la compañía porque creo en su potencial de sacar lo mejor de nosotros. Comparezco hoy ante ustedes para afirmar que sus productos dañan a la infancia, avivan la división, debilitan nuestra democracia y mucho más. Quienes gestionan la empresa conocen cómo hacer que Facebook e Instagram sean más seguros, pero no lo harán. (...). Es urgente que el Congreso actúe. Esta crisis no se resolverá de otro modo”, ha sentenciado. “[La empresa] antepone la obtención de beneficios astronómicos al bienestar de la gente”.
Frances Haugen, extrabajadora de Facebook, sobre el uso de Instagram por adolescentes: "Imagina la situación: cada vez que entras en la plataforma te sientes peor, pero también tienes miedo de estar aislado si no la abres". pic.twitter.com/fZxCO5aQ7j
— El HuffPost (@ElHuffPost) October 5, 2021
¿Qué revelan los Facebook Files?
En su declaración, Haugen ha hecho énfasis en la conclusión central de la investigación de los Archivos de Facebook: la compañía sabe que es nociva para sus usuarios (especialmente para los niños y adolescentes) e incide a sabiendas en esas prácticas lesivas con un único objetivo: hacer más dinero.
“Facebook sabe con gran detalle que sus plataformas están plagadas de fallas que causan daños, a menudo de formas que solo la empresa comprende completamente. Ese es el hallazgo central de una serie de Wall Street Journal, basada en una revisión de documentos internos de Facebook, incluidos informes de investigación, discusiones de empleados en línea y borradores de presentaciones a la alta gerencia”, expone la investigación. “Una y otra vez, muestran los documentos, los investigadores de Facebook han identificado los efectos nocivos de la plataforma. Una y otra vez, a pesar de las audiencias del Congreso, sus propias promesas y numerosas exposiciones en los medios, la empresa no las arregló. Los documentos ofrecen quizás la imagen más clara hasta ahora de cuán ampliamente se conocen los problemas de Facebook dentro de la empresa, hasta el propio director ejecutivo”, añade el periódico estadounidense.
Instagram, tóxico para los adolescentes
Los documentos de Facebook desclasificados por el Journal muestran, por ejemplo, que Instagram es perjudicial para una parte de sus usuarios más jóvenes y "especialmente tóxico" para las adolescentes. Otra parte de la investigación hace referencia a informes que sugieren que las reglas de Facebook no se aplican para todos los usuarios: hay una élite secreta que está exenta.
Asimismo, los informes confirman que un grupo de empleados de Facebook han intentado alertar a los directivos sobre los cárteles de la droga y a los traficantes de personas. Pero en muchas ocasiones la respuesta de la empresa ha sido “débil”.
El impulso que Mark Zuckerberg intentó brindar a la promoción de la vacunación contra el coronavirus a través de su plataforma fue otra de las jugadas que falló: según los documentos internos, el colectivo negacionista de la pandemia usó las propias herramientas dispuestas por la tecnológica para expandir su mensaje.
El asalto al Capitolio
En su comparecencia ante el Senado, Frances Haugen también ha mencionado la influencia de la red social en asuntos como la violencia étnica en Etiopía o en el asalto al Capitolio de este año. La exempleada ha descrito “un sistema que amplifica la división, el extremismo y la polarización, y socava las sociedades de todo el mundo”. “Eso provoca violencia en la vida real, que en ocasiones cuesta vidas. (…) Las investigaciones internas de Facebook han confirmado repetidamente estos problemas. Estamos hablando de una empresa que se ha hecho multimillonaria a costa de nuestra seguridad, incluida la de nuestros hijos”, ha detallado.
Así, Haugen ha pedido a los legisladores que tomen cartas en el asunto, ya que “casi nadie fuera de Facebook sabe lo que sucede dentro de Facebook”. “Se oculta información vital al Gobierno de EE UU, a sus propios accionistas y a los gobiernos de todo el mundo para sortear la ley. Los documentos que he proporcionado demuestran que nos engañan repetidamente en asuntos como la seguridad de los niños, su papel en la difusión de mensajes de odio y la polarización”.
“Quieren que creamos que estos problemas no tienen solución. Que lo que subyace es un dilema entre la libertad de expresión y la privacidad; entre la diversión que implica compartir fotos con tu familia y la distribución de desinformación. He venido a decirles que eso no es cierto. Todo eso tiene solución. Es posible crear redes sociales más seguras, si no dejamos que Facebook elija su propio beneficio al bienestar de sus usuarios. Si no hacemos algo, nada cambiará”, ha concluido Frances Haugen. @mundiario