Netflix y el Templo Satánico hacen las paces
Finalmente, el gigante del streaming y la organización satánica han llegado a un acuerdo amistoso para evita ir a juicio por tres delitos: infracción del copyright, daños al negocio y violación de marca registrada. ¿Fin del culebrón?
Netflix y el Templo Satánico han hecho las paces. Finalmente, y después de tres largas semanas de idas y vueltas, el gigante del streaming llegó a un acuerdo amistoso con la organización satánica luego de que esta interpusiera les demandara por plagiar la estatua de Baphomet en Las escalofriantes aventuras de Sabrina.
De acuerdo a las informaciones de los medios locales y según un comunicado publicado por la propia secta, tanto Netflix como Warner Brothers, los productores de la serie, pactaron con el Templo Satánico para evitar ir a juicio por tres delitos: infracción del copyright, daños al negocio y violación de marca registrada.
En total, los tres delitos sumaban un montante de 130 millones de euros, la cifra que exigieron en la demanda interpuesta en un tribunal de Nueva York. Lo que se desconoce, son las cláusulas finales que han firmado ambas partes en dicho arreglo amistoso, pues están sujetas a un pacto de confidencialidad.
"El Templo Satánico se complace en anunciar que la demanda que presentó recientemente contra Warner Bros y Netflix se ha resuelto amistosamente. Los elementos únicos de la estatua de Baphomet de Templo Satánico han sido reconocidos en los créditos de los episodios que ya han sido filmados", reza el comunicado.
Pero la denuncia hecha a principios de mes por uno de los fundadores de esta organización no sólo versaba sobre el uso no autorizado de la imagen de Baphomet, sino que aseguraban que, además, la deidad fue erróneamente retratada como un símbolo del mal, pues en la serie de Netflix se le asocia con el canibalismo, el asesinato y la tortura, cuando, según ellos, su verdadera misión es fomentar la benevolencia y la empatía entre las personas.
A ver. La molestia de la organización y el génesis de todo este culebrón, que parece haber llegado a su fin, radicó precisamente en lo que la estatua representa en la serie, no tanto el hecho de que haya sido utilizada sin autorización. Finalmente, el Templo Satánico se ha salido con las suyas y le ha ganado el duelo a Netflix. ¿Enhorabuena? @mundiario
