Dictan cinco años de prisión a un tatuador que se masturbaba delante de sus clientas

Tatuaje de Buda. / Tatuantes.com
Tatuaje de Buda. / Tatuantes.com
En la primera acusación la denunciante contaba con un elemento de prueba “contundente”, ya que ofreció un pantalón manchado con semen del acusado, pero “la policía entendió que no era relevante”.
Dictan cinco años de prisión a un tatuador que se masturbaba delante de sus clientas

Un hombre de oficio tatuador ha sido detenido y acusado de abusar sexualmente de sus clientas. El Juzgado de lo Penal 3 de Valladolid lo ha condenado a cinco años de cárcel y dos de libertad vigilada.

Los señalamientos van más allá de abusar sexualmente de varias clientas con tocamientos y con exhibición de genitales, el sujeto es señalado de haberse masturbando ante las mujeres.


Quizá te pueda interesar

Le rompe la nariz a un policía por pedirle que se pusiera la mascarilla

Capturan en Barcelona a un peligroso capo fugitivo de la mafia calabresa


Al respecto, el juez critica la “negligencia” de la policía al haber ignorado a la primera denunciante de la que el magistrado elogia su “fortaleza” a la hora de denunciar los hechos. Los abusos ilegales del tatuador iniciaron en un centro de tatuajes y piercings que el acusado tenía, primero en su domicilio, y después en un local. La primera denuncia se realizó en el año 2018, aún cuando los primeros abusos los cometió en el 2015, de acuerdo con fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-León.

Para el juez, que le ha impuesto la condena por tres delitos de abusos sexuales, existen “elementos de prueba como para creer que la versión de las víctimas es verosímil y contundente, y constituye prueba bastante de la realidad de lo que es objeto de acusación cuando cinco personas declaran sobre hechos similares sin guardar relación alguna previa con el acusado ni posterior entre ellas”.

Tras las declaraciones de las víctimas, el magistrado considera que las explicaciones del ahora condenado “son parcas, contradictorias y, en ocasiones hasta pueriles".

El juez considera que la actuación de la policía ante la primera denuncia de una de las víctimas en 2018 constituye un comportamiento que además podía haber concluido en la absoluta falta de persecución de unos hechos que se han reiterado en el tiempo y para los que la denunciante contaba con un elemento de prueba “contundente”, ya que ofreció un pantalón manchado con semen del acusado, pero “la policía entendió que no era relevante”.

El juez ha considerado que se trata de una "negligencia policial”, que podía haber evitado un enjuiciamiento prolongado, pues si en un análisis científico se determina que en el pantalón de la denunciante había semen toda excusa del procesado sería relevada. “Cualquier otra víctima menos sensibilizada, cualquier otra persona menos beligerante o que se sintiera culpabilizada por lo sucedido hubiera abandonado su interés, no ha sido el caso, como también la rectificación policial una semana después, aunque perdida ya una prueba importantísima, subsanaba en parte la ineficacia inicial, ha agregado el magistrado. @mundiario

Comentarios