La dramática carta de la madre de las niñas de Tenerife: "Quiero desaparecer"
Han pasado 22 días de la desaparición de las hermanitas Anna y Olivia y su madre, Beatriz Zinmermman dice haber “perdido las fuerzas”, pero sigue suplicando ayuda para encontrarlas.
La madre de las niñas desaparecidas en Tenerife, vuelve a reaparecer en redes, esta vez con una carta más dramática, suplicando piedad ante el dolor de no tener y no saber nada de sus niñas.
"Tres semanas, ya no me salen casi las palabras... yo también quiero desaparecer... ya no tengo fuerzas... esto es una tortura...pero no podemos rendirnos...las niñas me necesitan y yo a ellas...lo que más me duele es pensar que no puedo saber cómo están...no poder hablar...no saber cuándo las voy a ver”, se deja leer en la carta desde una cuenta en Instagram que se creó con la intención de apoyar la búsqueda de las niñas.
Zimmerman, pidió que no se deje de compartir las imágenes por todo el mundo. “No olvidemos que la perseverancia y continuidad es lo que logra finalmente los resultados”.
“Sé que todos tienen sus vidas, sus problemas y que seguir escuchando cosas tristes les pondré más tristes, pero ¿se imaginan que gracias a todos los esfuerzos las encontramos?
En torno a las investigaciones, dicen que el busca encuentra y que quien va hasta el lugar donde estuvo por última vez recuerda alguna pista que lo lleve a lo que está buscando. Una metodología parecida es la que emplea la Guardia Civil quien sigue insistiendo en hallar rastros de las niñas desaparecidas el 27 de abril.
Los agentes remolcaron este miércoles, la embarcación de Tomás, padre de Anna y Olivia, para someter la lancha del padre a un nuevo análisis, previsiblemente con la ayuda de dos perros adiestrados para hallar restos orgánicos.
La Guardia Civil remolca la embarcación de Tomás Gimeno. / RR SS
Como informó Mundiario la embarcación de Gimeno fue requisada la misma noche que huyó de Tenerife cuando fue sospechoso de algún traslado de droga. Sólo tenía un pequeño compartimento en la popa. No había drogas ni equipaje.
Lo único que hallaron de importancia fueron rastros de sangre, pero confirmaron después que no se trataba de las niñas sino del padre. En el lugar en el que fue hallada la lancha, vacía y a la deriva, los equipos de rescate localizaron flotando en el agua una silla de retención infantil.
Los agentes policiales esperan una aprobación judicial para emplear en las labores de búsqueda un sonar y un robot submarino cedidos por el Instituto Español de Oceanografía.
La casa de Gimeno, una vez más será requisada y analizada, para ver la posibilidad de una pista que lleve a las niñas. @mundiario
