El 2016 bate el trágico récord de migrantes muertos en el Mediterráneo

La crisis migratoria que enfrenta Europa ha arrojado datos cada vez más escalofriantes. En lo que va de 2016 alrededor de 3.800 personas han perdido la vida en su intento de cruzar el Mediterráneo, una de las rutas más peligrosas para aquellos migrantes y refugiados que huyen de países como Nigeria, Eritrea, Gambia o Samalia. Esta cifra ya supera la del 2015 en la que fallecieron 3.771 personas.

El portavoz, William Spindler, de Acnur –una agencia de la ONU para los refugiados– también ha informado que entre las rutas que se han incluido en el reporte son las del mar Egeo, la parte central que une a Libia con Italia y el mar que da a las costas de España. En esta última se reportan que han llegado 4.981 personas de las que 62 murieron.

La situación cada vez se vuelve más preocupante pues las condiciones meteorológicas empeoran conforme se acerca la época de invierno y sumándose, las mafias trabajan de una forma muy organizada. Por tanto, temen que los número aumenten en los últimos dos meses que faltan para terminar el año. Las cifras comienzan desde 2012 en el que la ONU registró 500 muertos en alta mar. Hacia el 2013 aumentaron a 600, pero se disparó en 2014 llegando a los 3.500, en 2015 a los 3.771 y en este 2016 se elevó la cifra a 3.800.

Otra de las preocupaciones es la constante negligencia de los traficantes para lanzar a las personas al mar en "cualquier cosa que tienen a la mano". Se ha reportado por el momento que "la marina italiana quema las barcas de goma o madera en la que viajaban los migrantes para que no sean reutilizadas" puesto que son instrumentos que ponen en peligro a las personas que la usarían de nuevo.  Por el momento, la organización confirma que la cifra aumentará y que en estas últimas semanas ha habido un incremento en los rescates con fallecidos.