EEUU podría cerrar su embajada en Cuba por el misterio de los ataques sónicos contra sus diplomáticos

Embajada de Estados Unidos en Cuba. / cu.usembassy.gov
Embajada de Estados Unidos en Cuba. / cu.usembassy.gov

El secretario de Estado Rex Tillerson ha calificado el extraño caso como algo "muy grave" y ha advertido que desde Washington se estudia la posibilidad de clausurar la embajada estadounidense en la isla.

EEUU podría cerrar su embajada en Cuba por el misterio de los ataques sónicos contra sus diplomáticos

El misterioso caso de los ataques sónicos que ha afectado a más de veinte diplomáticos estadounidenses, y al menos a cinco funcionarios canadienses en Cuba sigue creciendo. Las alertas de las autoridades se han encendido luego de que esta semana el número de víctimas ascendiera. El FBI investiga la extraña situación desde La Habana, aunque sin mucho éxito, por lo que Washington no descarta la posibilidad de tomar una medida más drástica: cerrar la embajada para proteger a su personal.

Según ha informado este domingo el secretario de Estado, Rex Tillerson, la alternativa de clausurar la sede diplomática norteamericana en la isla cubana "está siendo evaluada”. “Se trata de un asunto muy serio por el daño que algunos individuos han sufrido. Algunos de ellos han sido repatriados", afirmó el jefe de la diplomacia estadounidense en una entrevista en la cadena de televisión CBS.

La declaración de Tillerson se produce luego de que cinco senadores republicanos escribieran este viernes una carta dirigida al Departamento de Estado, en la que reclamaban que se le exigiera a La Habana explicaciones en torno a los extraños ataques auditivos que han estado sufriendo los funcionarios estadounidenses desde finales de 2016, y que han traído repercusiones realmente graves, como daños cerebrales. "Además pedimos que se declare de inmediato persona non grata a todos los diplomáticos cubanos acreditados en EE UU y que se cierre la embajada de EE UU en La Habana si Cuba no toma medidas tangibles", reza el comunicado firmado entre otros por el poderoso senador Marco Rubio.

Sobre la misteriosa situación no hay nada claro de momento. El FBI ha emprendido una investigación con la colaboración del gobierno de Raúl Castro, pero el motivo y el origen de los ataques sónicos continúa siendo un enigma. El escándalo se agiganta por el posible cierre de la sede diplomática de EE UU en la isla cubana, la cual  reabrió sus puertas en 2015, tras medio siglo de ruptura de relaciones diplomáticas entre ambas naciones.

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