Otro alto funcionario de la etapa kirchnerista pillado, esta vez escondiendo 9 millones de dólares

José López, ex secretario de Obra Pública de Argentina, en plena detención. / RRSS
José López, ex secretario de Obra Pública de Argentina, en plena detención. / RRSS

Desde que Cristina Fernández de Kirchner perdiese la presidencia de Argentina, el kirchnerismo no levanta cabeza. La corrupción durante sus años de gobierno está siendo destapada de manera brutal.

Otro alto funcionario de la etapa kirchnerista pillado, esta vez escondiendo 9 millones de dólares

José López, secretario de Obra Pública de Argentina durante los años 2003 al 2015, es decir, durante toda la época de gobierno kirchnerista (primero con Nestor Kirchner y luego con su mujer, Cristina Fernández de Kirchner), ha sido detenido cuando intentaba esconder nueve millones de dólares en siete bolsas en un convento de Buenos Aires. Digno de cualquier guión de película, el kirchnerismo sufre con esta dantesca imagen un duro golpe, uno más seis meses después de perder las elecciones frente a Mauricio Macri.

Los Kirchner tuvieron todo el poder en una de las épocas de mayor expansión económica de los últimos 100 años en Argentina. La obra pública era su apuesta estrella y López llegó a manejar directamente fondos de unos 9.000 millones de euros en diversos proyectos. 

Los nombres propios en esta trama que la justicia argentina esta destapando ahora son:

> José López, ex secretario de Obra Pública de Argentina y mano derecha de Julio De Vido.
> Julio De Vido, Ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.
> Ricardo Jaime, exsecretario de Transportes, ahora está en la cárcel por corrupción en la compra de trenes inservibles a España y Portugal. Fue el primer encarcelado del kirchnerismo.
> Lázaro Báez, cajero de banco cuando conoció a Néstor Kirchner y que se convirtió en un empresario multimillonario con la obra pública que le entregaban los Kirchner en el poder. Ahora también está en la cárcel.

Estas cuatro personas controlaban la obra pública en Argentina, bajo el beneplácito de Néstor y Cristina F. de Kirchner.

El único que aún no ha caído del grupo que controlaba la obra pública es el propio De Vido, el jefe de López y Jaime, ambos en prisión. Tiene varias causas pendientes pero es diputado, tiene aforamiento, y los kirchneristas clave aún defienden que no se enteró de nada de lo que hacían sus subordinados.

Por ahora, la expresidenta Cristina Fernández no ha hablado.

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