Las motos eléctricas también pueden acogerse a las ayudas del Moves

¿Se han olvidado de las motos al diseñar la ayuda estatal de 3.750 millones de euros a la fabricación, digitalización, descarbonización, instalación de infraestructuras, formación y consumo en el mundo del automóvil? La patronal de los vehículos de dos ruedas, Anesdor, se quejó cuando se aprobó el plan de renovación del parque automovilístico sin hacerle mucho caso a las motocicletas. Pero lo cierto es que el Programa de Incentivos a la Movilidad Eficiente y Sostenible (Moves II) también incluye ayudas a motos eléctricas, del mismo modo que a los camiones propulsados por gas.

Las motos eléctricas pueden acogerse, pues, a las ayudas del Moves II gracias a la rectificación que ha realizado el Gobierno en el texto de la normativa presentada la semana pasada, donde se especificaba que estas subvenciones tenían carácter retroactivo para turismos y furgonetas, pero no se hacía ninguna mención a las motocicletas.

El nuevo plan renove destina 230 millones de euros para que particulares, autónomos y, en menor medida, pymes accedan a coches y furgonetas ligeras nuevos a cambio de achatarrar los viejos de más de diez años. El plan Moves II incrementa hasta los 100 millones los 40 que ofreció en el primer plan para impulsar la compra de vehículos 100% eléctricos o híbridos enchufables. Las ayudas, que no son acumulables, habrá que declararlas a Hacienda.

Un particular puede acceder a un solo turismo o furgoneta de cualquier tecnología de propulsión, si bien los coches de combustión no pueden superar emisiones de 120 g/km. El diésel puede recuperar cierto protagonismo perdido gracias a este nuevo plan. Caso práctico: alguien que posea un vehículo de más de 10 años y lo entregue para achatarramiento, tendrá una subvención de al menos 800 euros en la compra de un turismo nuevo, que si es eléctrico alcanzaría un ahorro de 5.000. El precio máximo del vehículo debe situarse en 35.000 euros, o en 40.000 en el caso de tener etiqueta CERO. @mundiario