El protocolo real sobre los tatuajes es bastante sorprendente

Gracias a Su Majestad la Reina Isabel II, la familia real británica vive la vida bajo un conjunto de reglas ligeramente diferente al de los demás mortales, también conocido como “protocolo real”. Veamos, tienen que usar medias color piel con vestidos y faldas, los sombreros son imprescindibles en los eventos formales, la "inclinación de la duquesa" es la única forma de sentarse, y el negro es un color mejor reservado para ocasiones sombrías. Entonces, es seguro asumir que no se les permite hacerse tatuajes, ¿verdad?..¡Incorrecto!

La nieta mayor de la reina, Zara Tindall, dio una respuesta muy esclarecedora cuando se le preguntó si alguna vez había dejado que sus hijos se tatuaran, lo que implica que básicamente no depende de ella…o cualquiera.

"No se ha hecho ningún tatuaje", dijo Zara recientemente a la revista Saga, refiriéndose a su esposo, Mike. "Prefiero que una de mis hijas llegue a casa con un piercing que con un tatuaje porque al menos se puede quitar. Sin embargo, no tendría moral si no las dejara".

Aparentemente, Zara se hizo perforar la lengua infamemente cuando era adolescente, lo que demuestra que, sí, incluso los miembros de la realeza pueden rebelarse de vez en cuando. Y si bien es cierto que Zara no es una "realeza trabajadora" de la misma manera que lo son el Príncipe Harry, el Príncipe William, Kate Middleton y Meghan Markle, todavía se adscribe al mismo protocolo que el resto de su familia, especialmente cuando pasa tiempo con la reina, que es mucho.

En otras palabras, ¡es definitivamente posible que Harry y William tengan tatuajes ocultos!  @mundiario