Mentiras intencionadas sobre fijos discontinuos
El coordinador general del Partido Popular, Elías Bendodo, ha acusado al Gobierno de “manipular" o "maquillar” los datos del desempleo y conseguir, de esa forma, mejorar las cifras de paro. Supuestamente el Gobierno ha actuado de esta forma para "apuntarse el tanto" de buenos gestores en esta materia. La acusación va dirigida a la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, pero no sólo a ella.
El coordinador general del Partido Popular focaliza su severa crítica en la contabilización de los trabajadores y trabajadoras fijas - discontinuas.
Aclaremos que esta figura se emplea en relación a “la realización de trabajos de naturaleza estacional o vinculados a actividades productivas de temporada, o para el desarrollo de aquellos que no tengan dicha naturaleza, pero que, siendo de prestación intermitente, tengan periodos de ejecución ciertos, determinados o indeterminados” (por ejemplo: trabajos en el sector turístico o los vinculados a la estacionalidad de la agricultura).
El coordinador general del PP ha expresado la crítica utilizando el siguiente razonamiento: "antes los fijos-discontinuos, que son los trabajadores que trabajaban unos meses sí y unos meses no, para que nos entiendan todos. Antes, los meses que no trabajabas, contaban en las listas del paro. ¿Qué pasa? Que ahora el Gobierno ha dicho que los fijos-discontinuos, los meses que no trabajan no cuentan en las listas del paro. Claro, tontos no somos. Y así consigue bajar la cifra de parados”.
La tajante afirmación del Coordinador General del Partido Popular merece varios comentarios:
1. El señor Bendodo falta a la verdad rotundamente. Parte, en su razonamiento, de una premisa falsa. Además, lo hace a sabiendas de su falsedad. Caso contrario (desconocimiento), peor, ya que sería absoluta incompetencia. Bendodo parte de la hipótesis de que con la nueva reforma laboral ha cambiado la forma de contabilizar la figura de los fijos- discontinuos.
Pues no es así. Es falso. Desde hace algo más de tres décadas y media, esta figura por sí misma no computa en el desempleo, ni por la vía del cómputo del paro registrado ni a través de la Encuesta de Población Activa (EPA). Ello es así porque el trabajador o trabajadora fija-discontinua mantiene una relación contractual permanente o estable con la empresa.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que las trabajadoras y trabajadores fijos-discontinuos en el momento en que no están activos, tampoco permanecen como trabajadores en alta en la Seguridad Social, con lo que no engrosan la cifra de afiliados. Señalo esto por si al señor Bendodo se le ocurre esta derivada ya que el último registro ha marcado un dato muy significativo al respecto: 20,3 millones de personas afiliadas a la seguridad social.
2. Con sus afirmaciones, el Coordinador General del PP ha vapuleado las estadísticas oficiales de nuestro país. No es que haya puesto en duda un dato. Es que ha negado su veracidad y ha señalado la posibilidad de que el Gobierno (supongo que éste o cualquier otro) "maquille" éste o cualquier otro dato oficial. Contentos con su aseveración estarán los empleados públicos del INE así como decenas de estadísticos y estadísticas facultativas de los diferentes ministerios, comunidades autónomas, órganos de control externo, etc. que diariamente trabajan para extremar la calidad de nuestras, ya excelentes, estadísticas. Señor Bendodo, póngase usted en contacto con Eurostat, con la OIT, con la OCDE, con la OMS, etc. y verá el nivel de credibilidad de nuestras estadísticas oficiales.
3. Un tercer comentario se podría referir a la capacidad del señor Bendodo y del Partido Popular en general, para afirmar sus éxitos de gestión en las comunidades autónomas y negar el éxito de gestión en el conjunto del país para la misma actividad. ¿Cómo se puede afirmar que la lucha contra el desempleo va estupendamente bien en Andalucía, Madrid, Castilla y León, Galicia, Murcia y Ceuta y que el Gobierno "maquilla" los datos del resto de Comunidades Autónomas (alguna gobernada por PNV o ERC) en su favor? Anótense esta misma reflexión para la gestión sanitaria, educativa, o de cualquier otro servicio esencial de gestión compartida.
4. Lo que sí puede ser imputable a una reforma laboral consensuada por el gobierno y los agentes sociales, es ofrecer un impulso para que los empresarios utilicen más la figura del fijo - discontinuo, reduciendo de este modo la temporalidad, una de las lacras de nuestro "mercado laboral". Ese sí podría ser un buen hilo del que tirar, señor Bendodo, el de las condiciones del mercado laboral: temporalidad, retribuciones, horarios, negociación colectiva, etc. Digo que es un buen hilo porque en el sistema económico en el que estamos, ese es un problema del que hablar con el señor Garamendi: la economía de mercado, la importancia social de la empresa, los derechos de los trabajadores y la Constitución española.
Al parecer el problema del desempleo es un problema que incumbe únicamente a un Gobierno que "maquilla" datos de paro y no es problema alguno del sistema empresarial español. Lo de Clinton, señor Bendodo: "es la economía, estúpido".
5. En un discurso parlamentario, allá por mayo de 1980, un diputado de las Cortes Generales, señalaba "cuando los ciudadanos son informados de la verdad (...) demuestran interés por la política. Cuando se les secuestra la realidad, los ciudadanos contestan con la apatía". La forma de hacer política, basándose en la falsedad, en la difamación, en la mentira, en la ausencia de rigor, etc. provoca desafección de la ciudadanía hacia la política y ello deteriora profundamente la base democrática de un país, ya que la desafección afecta muy gravemente a las instituciones que le dan soporte.
Cuidado, es relativamente fácil socavar los cimientos democráticos de un país como el nuestro y enormemente costoso levantarlos de nuevo. A la Historia me remito.
6. El señor Bendodo, coordinador general del Partido Popular, ha hecho justo lo que ha imputado al Gobierno, esto es, tomar por “tonta” a la ciudadanía.
7. Aparte de demostrar su ignorancia sobre la realidad. Porque en los datos habituales del empleo figuran como desempleados los demandantes de empleo. Y en ese contexto, puede ser demandante de empleo incluso alguien que esté trabajando, por ejemplo, a tiempo parcial, o el fijo discontinuo durante el tiempo en el que no está trabajando, o cualquiera que desee mejorar su empleo. Y esas realidades son las que ignora -voluntariamente o no- Bendodo. Pero es que su tesis tiene en contra el número de cotizantes a la Seguridad Social. Que son datos de realidad incontestables.
El problema es que mentir o tomar por idiota a la ciudadanía española no tiene coste. No está penalizado. Sale gratis al cuentadante (que además, no rinde cuentas ante nadie). Únicamente tenemos una opción y es dar respuesta a la siguiente pregunta (y hacerlo antes de acudir a una cita con las urnas): ¿Pondría usted un Ministerio en manos de un aranero? @mundiario
