Abanca da una nueva vida a las redes de pesca abandonadas en las costas gallegas

Abanca ha presentado este martes en Vigo, coincidiendo con la conmemoración del Día Mundial de los Océanos, el proyecto Redes Vivas. La iniciativa consiste en recuperar redes de pesca abandonadas para transformarlas en material de uso en los campos deportivos.

La responsable de Sostenibilidad de Abanca, María García, explicó que “esta actuación forma parte de la línea de acción ambiental del plan de sostenibilidad del banco, que se desarrolla bajo el sello Sentir Planeta Abanca”.

En la presentación también participaron la directora de Marketing de Abanca, Susana Ortiz; las redeiras artesanas de Malpica Carmen Villanueva y Ángeles Millé, y Saray Sanmartín y Jonathan Vila, capitanes de los equipos femenino y masculino del Club Balonmano Porriño, uno de los clubes que se benefician de la iniciativa.

Redes Vivas es un proyecto integral que tendrá continuidad en el futuro. Abarca todo el proceso de recuperación de las artes de pesca, desde su reciclaje hasta su colocación en canchas y campos deportivos de clubes patrocinados por el banco en el marco de su programa Abanca Deporte Base, una iniciativa que llega cada año a casi 20.000 deportistas de cerca de 1.700 equipos.

La acción tiene un impacto positivo en tres de las líneas estratégicas del banco: sostenibilidad, ya que contribuye al cuidado del medio ambiente y fomenta la economía circular; promoción de la economía local y los sectores productivos, aportando innovación y visibilidad a un oficio tradicional y artesano realizado mayoritariamente por mujeres, y apoyo al deporte, dotando de material a los clubes gallegos.

Jonathan Vila, capitán del equipo masculino del Club Balonmano Porriño; Carmen Villanueva, redeira; María García, responsable de Sostenibilidad de Abanca; Susana Ortiz, directora de Marketing de Abanca; Ángeles Millé, redeira, y Saray Sanmartín, capitana del equipo femenino del Club Balonmano Porriño. / Mundiario

La directora de Marketing de Abanca, Susana Ortiz, explicó en la presentación que la idea surgió como respuesta a la preocupación de la sociedad y del sector pesquero por el incremento exponencial de residuos en el mar. “Del conocimiento de nuestra unidad especializada Abanca Mar y su estrecha relación con los colectivos del mar, junto con el contacto que tenemos con los clubes a través de nuestro programa de apoyo al deporte, surge esta colaboración con las redeiras de Malpica y Corme, que consiguen dar una nueva vida a estas artes de pesca en los campos”, indicó.

Los aparejos recuperados serán utilizados en seis disciplinas deportivas de las 34 que apoya el banco a través del programa Abanca Deporte Base: fútbol, balonmano, fútbol sala, hockey patines, kayak polo y hockey hierba. Hasta el momento se han reciclado 1.384 kilos de redes extraídas de las costas, que se han transformado, gracias al trabajo de las redeiras, en 1.514 m2 de material deportivo. Las nuevas redes servirán para renovar 78 porterías de 39 clubes de las cuatro provincias gallegas. Las redeiras artesanas de Malpica Carmen Villanueva y Ángeles Mille mostraron su satisfacción por poder colaborar con un proyecto de este tipo, que además de cuidar el entorno, permite aportar innovación y dar a conocer y visibilizar el trabajo que realizan.

Durante el acto también se hizo una entrega simbólica de las primeras redes recuperadas a los capitanes de los equipos masculino y femenino del Club Balonmano Porriño, uno de los clubes deportivos que van a utilizar este nuevo material fruto del reciclaje.

Compromiso medioambiental

El cuidado del medio ambiente y la protección de la biodiversidad es una de las prioridades del Plan de Acción de Banca Responsable y Sostenible presentado por el banco el pasado mes de mayo. La entidad se ha marcado como objetivo alcanzar la neutralidad en carbono de su actividad en 2024 y las cero emisiones atribuibles a su cartera en 2050.

Con este fin, ha dado un impulso a proyectos en los que ya estaba trabajando para reducir el impacto negativo de su actividad en el medio ambiente. Entre otras medidas, tanto Abanca como su Obra Social, Afundación, consumen energía 100% renovable desde 2020, se ha realizado el cálculo de la huella de carbono del banco y se está diseñando un plan de reducción y compensación de emisiones. Además, se ha elaborado una estrategia para mejorar la eficiencia energética y la gestión de los residuos que genera.

También se potencian otras iniciativas de voluntariado y sensibilización medioambiental realizadas en colaboración con Afundación, como la reforestación, la retirada de especies invasoras o la limpieza de las costas y los fondos marinos, que este año se canaliza de manera prioritaria a través del Plan de conservación territorial-ON (PLANCTON), impulsado por la Obra Social de Abanca en colaboración con la Fundación Biodiversidad y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

El plan de sostenibilidad del banco contempla, así mismo, el apoyo a la actividad económica sostenible, donde el proyecto Redes Vivas tiene un impacto positivo claro al promover un oficio artesano y tradicional como es el de las redeiras que favorece la economía local de las localidades costeras gallegas. @mundiario