Rusia castiga a Telegram por no exponer a sus usuarios ante el gobierno

La justicia rusa condena a Telegram. Un tribunal moscovita ha impuesto una multa de  800.000 rublos (unos 14.000 dólares) a la plataforma de mensajería digital por negarse a exponer ante el Servicio Federal de Seguridad (FSB, por sus siglas en inglés) del país las llaves de encriptación de la aplicación, que permiten leer los datos de mensajes de los usuarios.

Según han informado medios internacionales, las autoridades de Rusia han determinado que Telegram es culpable de una grave infracción administrativa, al incumplir con la ley que le obliga a desvelar, según está establecido en el marco de la lucha contra el terrorismo y las comunicaciones entre sus usuarios, los datos de las personas que utilizan la aplicación.  

Asimismo, se ha conocido que la guerra entre la plataforma de mensajería y la nación rusa empezó hace unos meses, cuando la FSB solicitó al fundador de la plataforma, Pável Dúrov, que permitiera el acceso a la información confidencial de sus usuarios, pero el padre de Telegram se negó a proporcionar esta entrada y en medio de la presiones decidió marcharse del país. En aquel momento Dúrov denunció que los servicios de seguridad le estaban acosando para que revelara información sobre grupos de la oposición rusa que empleaban la red social VKontakte, desarrollada por el mismo en 2006.

Ahora, tras la nueva sanción impuesta, la plataforma digital tendrá un plazo de diez días para apelar la decisión del tribunal y decidir si se mantiene firma en su postura o bien, se doblega y entrega los datos solicitados por el gobierno. De no acatar la solicitud, Telegram podría ser bloqueado en Rusia, lo cual llevaría a una importante caída para la aplicación, que en el mencionado país alcanza los diez millones de usuarios. @mundiario