Los ricos en Miami ganan 40 dólares por cada dólar que ganan los pobres

Imagen de Miami. / editionhotels.com/miami-beach
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En el condado de Miami-Dade, en el Sur de la Florida (EE UU), el índice de pobreza abarca aproximadamente al 20 por ciento de los residentes locales.

Los ricos en Miami ganan 40 dólares por cada dólar que ganan los pobres

Según un reciente estudio de la Universidad Internacional de la Florida (FIU), la pobreza en Miami se mantenía en el año 2014 en el mismo nivel que en 2010. Ha aumentado el índice de empleo y el valor de la propiedad inmobiliaria ha subido, pero esa mejora no ha alcanzado a la mayoría de la población.

En 2014, el 17,7 por ciento de los residentes del Sur de la Florida vivían por debajo del umbral de pobreza, según datos de la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense de la Oficina del Censo. En Miami-Dade, también de acuerdo con la Oficina del Censo, el índice de pobreza en 2014 abarcaba aproximadamente al 20 por ciento de los residentes locales.

Entretanto, por cada dólar que ganan las personas en el 20 por ciento más pobre de la población de Miami-Dade, el 5 por ciento más rico se embolsa 40 dólares. Esa desigualdad está muy por encima del promedio nacional, que es de 29 a 1, pero por debajo de áreas como Manhattan, donde la diferencia es de 88 a 1.

El estudio de FIU indica que la recuperación económica ha favorecido de manera muy desigual a los ricos. Desde que terminó la crisis desatada en 2008, la cantidad de empleos en el Sur de la Florida ha crecido, pero son puestos de trabajo de bajos salarios, casi siempre en el sector de hotelería y restaurantes. Un gran número de los trabajos bien pagados que había antes de la recesión han desaparecido, para ser sustituidos por empleos de bajos ingresos.

El boom de las viviendas de lujo en Miami –el 6,3 por ciento de las viviendas tienen un valor superior al millón de dólares– está fuera del alcance de la mayoría de los miamenses. Mientras la costa se puebla de rascacielos suntuosos con todas las comodidades e impresionantes vistas del océano, el 20 por ciento más pobre de la población tiene escasas probabilidades de ascender en la escala social. Por cada dólar que perciben, los que viven en la opulencia ganan 40. Esa es, en estos momentos, la aritmética de la desigualdad en Miami.

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