La UE impone en España la reforma de las pensiones y un calendario de subida de impuestos

La Comisión Europea, el órgano ejecutivo comunitario, ha ampliado hasta el 6,5% el tope de déficit público para España para este año, lo que equivale a unos 65.000 millones de euros de desfase entre los ingresos y los gastos del Estado español. ¿A cambio de nada? No. A cambio, Mariano Rajoy deberá subir impuestos e implementar la segunda reforma de las pensiones, léase bajarlas de alguna forma. Lo más probable es que las pensiones se actualizarán en función de la esperanza de vida y no de la inflación, con lo que no podrán subir como hasta ahora.

A principios de 2014 empezará a funcionar la ley de desindexación, lo que implica desligar los precios públicos de la inflación.

Podría haber subidas del IVA en algunos productos y nuevos impuestos medioambientales, sobre todo a los carburantes, que pasarían de estar gravados con el tipo reducido, que es del 10%, a hacerlo con el ordinario, del 21%.

¿Acaba ahí la lista? No. En 2013 deberá aprobarse una nueva ley de Colegios y Servicios Profesionales y recortarse más el gasto farmacéutico en los hospitales.

Bruselas también exige una revisión de la reforma laboral durante lo que queda de 2013.