Juan Verde se muestra optimista sobre el Tratado de Libre Comercio entre la UE y EEUU

Entrevista online realizada por Noemí Fariñas, desde su experiencia como analista económica, a Juan Verde, experto en comercio internacional.

Juan Verde fue asesor del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en temas de economía internacional, sostenibilidad y comunidad hispana. También Co-director Internacional en su campaña de reelección de 2011-2012. Además trabajó como subsecretario adjunto para Europa del Departamento de Comercio del Gobierno de Estados Unidos. Como cargo de confianza de la Casa Blanca, asesoró al ministro de Comercio en la puesta en marcha de políticas, programas, acuerdos internacionales e iniciativas para el fomento del comercio internacional y las inversiones estadounidenses en la región. Asimismo, durante la administración del presidente Bill Clinton trabajó como Asesor de Comercio Internacional para ese mismo departamento y en numerosas campañas políticas, entre las que cabe destacar las del senador Ted Kennedy, el vicepresidente Al Gore, el senador John Kerry y la ex secretaria de Estado Hillary Clinton.

Ahora ejerce como asesor de numerosas compañías en Europa y EEUU tales como Sovering Bank (la división estadounidense del Banco Santander) o la empresa de energías renovables Abengoa. Asimismo, es miembro de instituciones como el Consejo de Administración de la Kennedy School of Government de la Universidad de Harvard o el Consejo Asesor Internacional del Gobierno de Lituania, entre otros.

Hola Juan. Su experiencia a los dos lados del atlántico es obvia después de esta introducción y, como experto en el ámbito comercial internacional, el Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y Estados Unidos es tarea fácil para usted. Le formulo las siguientes preguntas y espero que disfrute en sus respuestas:

- El acuerdo de Libre Comercio entre la UE y EEUU pretende ampliar el mercado de bienes y servicios. ¿Cómo cree que beneficiaría a ambas economías?

- No lo digo yo, lo ha dicho el comisario europeo de Comercio, Karel de Gutch: esta nueva convergencia reguladora generará un incremento del PIB en la Unión Europea entre el 0,5 y el 1% y la creación de cientos de miles de nuevos puestos de trabajo. Del otro lado, la Cámara de Comercio estadounidense prevé que la supresión de los aranceles de importación impulsaría el comercio a ambos lados Atlántico en más de 120.000 millones en los próximos cinco años. Las ventajas son incuestionables, es una oportunidad que ninguna de las dos partes debería dejar pasar.

- El presidente de EEUU, Barack Obama, afirmó que la UE, económicamente estancada, se ve mejor dispuesta para llegar al acuerdo, aunque consideró que algunos integrantes de la UE podrían bloquear el tratado, donde el sector agrícola lo tiene más complicado. ¿Podría explicar este bloqueo?

- Habrá que verlo llegado el momento. Aunque las exportaciones a EEUU aumente, el comercio dentro de la Unión puede resentirse. En España apenas se ha iniciado el debate, pero Francia ya ha expuesto sus prevenciones a la entrada masiva de alimentos transgénicos que ahora están prohibidos en Europa pero son legales en EEUU; otros países, como Alemania o Gran Bretaña, apoyan abiertamente el proyecto…

- Se podría decir que el acuerdo casaría a las dos grandes economías con la frase de “que ni el Atlántico ni los aranceles nos separen”. ¿Cómo cree que beneficiaría a los mercados en el ámbito de inversión, fabricación y venta?

- Actualmente, las dos economías acumulan el 47% del PIB mundial y los lazos son ya muy estrechos, apenas hay un arancel medio en la UE del 5% y del 3,5 en EE.UU. Más allá de facilitar el comercio y la industria, el objetivo debería ser eliminar barreras técnicas que aún existen, como el reconocimiento de estándares alimentarios, protección del medio ambiente o de derechos de propiedad intelectual, certificaciones técnicas…

- Y en el ámbito laboral que es el que más pesa se prevé más empleo. ¿Cómo beneficiaría a los ciudadanos? Por ejemplo, un constructor, podría hacer el mismo servicio en la UE y en EEUU ¿cómo le beneficiaría este pacto?

- En términos globales, este acuerdo permitirá que un profesional de cualquier lado del Atlántico juegue con las mismas reglas de juego y el único condicionante de la geografía para hacer llegar su producto o servicio a sus clientes. Así, un agricultor de Almería podrá vender sus productos en Boston o Nueva York en igualdad de condiciones que un agricultor de California; un informático que tenga una idea brillante en su casa de un barrio de Madrid podrá defenderla igual que otro que la tenga en un garaje de Montana… Hay mucho que ganar si colaboramos y mucho que perder si no lo hacemos.

- Tener como socio comercial a Estados Unidos es muy interesante ¿verdad? estratégicamente para Europa, pues la economía de EEUU se recupera y presenta perspectivas favorables, ya por su mercado inmobiliario y laboral, su eficiencia energética y la revolución tecnológica. ¿Será fácil que la Unión Europea se contagie de esta recuperación?

- Ojalá ocurra ese “contagio”. Y ojalá la firma de este tratado sirva para que Europa avance definitivamente como una única entidad en lo económico, pero es evidente que aún hay muchas “Europas” dentro de la Unión. Lo hemos visto estos años pasados, no ha habido una respuesta única, rápida y eficaz ante la crisis. Las instituciones europeas están sobredimensionadas, se pierden en burocracias e intereses nacionales. En cualquier caso, es cierto que hay campos como el de las energías renovables o las nuevas tecnologías en los que Europa -y España en particular- parten con cierta situación de ventaja y pueden encontrar grandes oportunidades de negocio con este Tratado.

- Se prevé que empiecen las negociaciones en junio y quizás en dos años surtan efecto ¿Quiénes negociarán? ¿se muestra optimista ante el pacto?

- Las negociaciones las llevaran a cabo los gobiernos de EEUU y la Unión Europea en colaboración y consulta con las cámaras de comercios, asociaciones empresariales y comunidad de expertos en comercio bilateral. Será un proceso complejo pero estoy seguro de que al final triunfará el sentido común y la lógica. Si bien pueden haber grupos de intereses concretos que se opongan a este tratado, al final este acuerdo solo es bueno para el conjunto de la sociedad tanto en EEUU como en Europa.

Ha sido un placer contar con usted. Muchas gracias por aclarar desde su experiencia este gran tema.