Fariña: un éxito rotundo y en camino a convertirse en la serie del año

Una serie que ha dado de qué hablar este 2018 ha sido Fariña, basada en historia de Nacho Carretero, quien narra cómo un contrabandista logró burlar a las autoridades de Portugal y España gracias a una bicicleta y un saco de carbón. La serie se ha convertido en una de las más interesantes en los últimos tiempos y llega de la mano del propio Carretero, junto a Ramón Campos, Gema R. Neira, Cristobal Garrido y Diego Sotelo.

¿Por qué está impresionando? Sencillo, la serie es un soplo de aire fresco para la televisión española que desde hace algún tiempo no se arriesgaba con algo nuevo, intenso e interesante. Además, es imposible no aludir al hecho de que Fariña sea una historia de la vida real y que de alguna forma marcó a España.

La serie no da espacio a mentiras, a complejos o protestas. Es tal cual y comienza desde Galicia para contar desde un punto muy local los hechos de una historia real. Con Fariña, la productora se vuelve a arriesgar alejándose de los culebrones y el desamor que tanto enganchan pero poco entregan en contenido. Sin duda, el toque político es espinoso, pero es algo que muchos esperan y quieren ver para poder entender qué ocurrió, porque si no has visto Fariña, debes saber que los protagonistas aparecen con nombre y apellidos, sin sombras o matices, es lo que debe ser.

Sí, es cierto, encontrarás un poco de drama, pero siendo honestos es imposible no aplicar un poco de sabor a la historia, que de por sí, ya deja mucho puntos intensos y muy concretos. Más de uno habrá quedado enganchado con el simple título del sexto capítulo “España se droga”. No es solo producción, actuaciones, vestuarios… es historia, análisis y cruda realidad. Fariña va más allá de lo conservador y se sumerge sin miedo a un estanque donde pudo ahogarse, pero finalmente está triunfando como un producto original que puede servir como ejemplo para otras series españolas. @mundiario