Creed 3 la cinta fuera del legado de Rocky Balboa ¿gran acierto o gran error?
Finalmente nos encontramos frente a la novena película dentro de la saga de Rocky Balboa así como la tercera película como spin-off enfocada en el hijo de la leyenda del box Apollo Creed: Adonis Creed; sin embargo, estamos presenciando la primer ocasión que no se cuenta con la presencia de Sylvester Stallone como Rocky.
Pese a que este problema fue algo más interno entre el actor con el productor de la saga completa de Rocky, el hecho logró dividir a los fanáticos de esta odisea del box, aun incluso sin haberse estrenado, pues su ausencia abrió el debate sobre si esta película lograría estar a la altura de sus antecesoras.
Aún así, esta película que marca el debut como director de Michael B Jordan, quien a su vez interpreta a Adonis Creed, ciertamente tiene una esencia diferente a todo lo antes visto pero para bien, pues demuestra una forma en la que la saga de Creed tuvo que ser desde un inicio.
Es notable el cambio que se dio con la ausencia de Stallone, pues en Creed 1 y 2 la aparición de Balboa en la historia, así como el apoyo del actor en la parte de la producción y la historia, hacía que esta nueva saga se sintiera solo como una continuación de toda la saga de Rocky y no como algo original lo que sí podemos ver en este último caso.
Asimismo, en esta película, los riesgos y diferencias que se atreven a realizar con en el guión e incluso los efectos visuales, ya que en entrevistas B. Jordan reveló que tomó inspiración en el mundo del anime para las secuencias de pelea, dichas que pudimos ver en el principio y en el último enfrentamiento de la cinta.
Aunado a esto, vemos una historia más fría; la parte sentimental que permea dentro de cada película de esta saga está presente, pero tiene un giro importante, pues nos ofrece una historia de traición hacia la segunda familia que podemos llegar a formar en la vida: nuestros amigos.
La premisa de esta película juega un papel importante a la hora de finalizar, ya que nos indican que Adonis Creed ha colgado los guantes y dejará su lado de peleador profesional de box para centrarse en otras facetas, pero una cuestión personal lo obligará a tener una lucha más.
Esta premisa podría sonar como un cliché, no solo para esta saga, si no para un amplio mundo de películas, entre las que claro, destacan las que abordan el box y la lucha libre, pero, ¿Creed logra destacar o hacerlo diferente?
Si y no, al ser un tópico tan recurrente es imposible crear algo impredecible, por lo que el cierre de la película se torna algo débil; sin embargo, logra marcar una diferencia ofreciéndonos una disputa emocional del protagonista, enfrentando su pasado contra su presente, lo cual, acompañado de increíbles actuaciones, efectos visuales llamativos y un buen soundtrack, logran crear una cinta única y especial.
Sin duda la historia de Adonis Creed finalmente logra llegar al arco de desarrollo más importante, tanto dentro de la película como fuera, se nota que el cambio en la dirección y la falta de Balboa en esta cinta se supieron aprovechar, creando una cinta recomendable para disfrutar en su estreno en la pantalla grande. @mundiario
