Mientras nos dedicamos a discutir y a inventar polémicas en torno al fútbol, un niño de 9 años llamado George Shaw nos ha dado una gran lección a todos. El pequeño sufre una parálisis cerebral, pero con su esfuerzo y su pasión por el fútbol nos demuestra lo importante que es en la vida luchar y no rendirse. Gracias George, eres un crack.