En un contexto donde el autocuidado y el alto rendimiento parecen estar en conflicto, cada vez más empresas reconocen la importancia de invertir en el bienestar de sus empleados.
A todos nos pasa en algún momento de la vida laboral, ese día en que sentimos que el mundo se pone en nuestra contra y pasamos la jornada de lo peor. Sin embargo, que nada nos robe la paz.
El secretario de Estado para la Seguridad Social ha asegurado que "utilizar períodos de cómputo escasos, lo único que hace es perjudicar a los que son despedidos al final de su vida laboral".
Para sentir y asumir el pensamiento de Saramago vertido en este hermoso poema, debemos preparar formalmente nuestro envejecimiento, el fin de la vida laboral.