La autora logroñesa, Marta Sarramián, consigue hacernos conectar con la vida con respeto, tolerancia y amor, trasmitido bajo el paraguas del movimiento slow.
“Necesitamos volver al recogimiento, a la atención plena, a la degustación lenta de las cosas que tienen una verdadera y sustancial valía”, comenta el autor que también es colaborador de MUNDIARIO.