Los expertos han advertido de que las ‘nubes’ de estos insectos son terriblemente peligrosos para los cultivos, ya que pueden consumir la misma cantidad de alimentos que 35.000 personas.
Solo medio millón de estos animales es capaz de comerse en un solo día el peso en comida equivalente a diez elefantes, 25 camellos o 2.500 personas, así como destruir 200 toneladas de vegetación.