Quiero que vuelva esa televisión de los noventa donde Pamela Anderson y las escorts playeras lucían sus maillots rojos durante el largo y cálido verano.
La organización PETA cuenta con Pamela Anderson entre su nutrido grupo de rostros famosos que reivindican el derecho de los animales y se oponen a su maltrato.
Tiempo de verano. Tal vez por eso el autor echa tanto de menos a Pamela Anderson, a esa hiperbólica Venus que todo adolescente necesita en sus fantasías para ser feliz.