Odia el delito y compadece al delincuente, decía Concepción Arenal, y es posible que algunos compadezcan al asesino, pero todos estamos más seguros al verlo en la cárcel…
Hay gente a quien la vida le supera, igual que hay personas capaces de sobrevivir a tragedias enormes, incluso a un holocausto, y salir con el alma intacta.
Tal vez lo más inquietante del caso de la niña Asunta Basterra no sean las causas de su muerte sino las de la obsesión social por conocerlas. Un análisis diferente.
La erótica del poder obnubila hasta las mentes más luminosas y casi siempre termina por cepillarse a buena parte de la humanidad a la que el asunto, sea el que sea, ni le va ni le…