Hay que reconocer que el autor ruso todo lo hace bien. La descripción de la psicología de los personajes, sus cuidados diálogos, la introducción de elementos políticos, militares, espirituales
En Al final, asuntos de vida o muerte, Marsh, además de relatar el enfrentamiento a su fatídica enfermedad, desde su posición honesta, vuelve a referirnos numerosas anécdotas muy jugosas
Marsh habla apenas de sus éxitos y reiteradamente de los errores que cometió, de la frecuente imposibilidad de lograr resultados plenamente satisfactorios, eso de lo que es tan dolorosamente…
Aquí, el retrato que vemos de su personaje es demoledor: un hombre que elude cualquier muestra de sensibilidad, que lo que más ama en su vida es su coche
Las páginas de estas tres narraciones rebosan un aire de ambientes inhóspitos, de amores insuficientes y afectos imposibles, de soledad fríamente acompañada.
El personaje de Atticus Finch, el padre de Jem y Scout, representa a un tipo de hombre casi inexistente, de una integridad moral llevada hasta las últimas consecuencias.
El cine Farhadi se centra en las relaciones humanas, incidiendo en sus habituales problemáticas desde un planteamiento que exige del espectador un difícil veredicto moral.
Nos hallamos ante centenares de “entradas léxicas”, cada una de las cuales es un reto resuelto en sí mismo, un hallazgo que pretende superar la mera ingeniosidad.
Leer su prosa serena, su adjetivación esmerada, me supone uno de esos grandes placeres estéticos que puede ofrecernos la literatura, el adentramiento en una intimidad que se resiste a desnudarse.
De una manera envolvente, enormemente fluida, con un tono coloquial, nos lleva a través de un paisaje cambiante, de una diversa mirada que pretende ser exhaustiva y lo consigue.
Aunque, en su esencia, estén basados en una muy bien documentada realidad, los hechos que relata la película son ficticios, y se inician en el Berlín Este de 1984.