Tanto el Gobierno como las FARC buscan que “el mayor número de habitantes del campo sin tierra o con tierra insuficiente pueda acceder a ella mediante la creación de un fondo de tierras para la paz”.
Hemos visto a la familia Couso reclamar responsabilidades por el asesinato de José y hemos visto a las autoridades del Gobierno español dar multitud de explicaciones que siempre sonaron a excusas.