"Con tolerancia y respeto, podemos vivir juntos", con estas palabras el Emir del Estado de Qatar, su excelencia, Tamim Bin Hamad Al Thani ha inaugurado el gran evento deportivo la Copa del Mundo.
El astro argentino y su selección están siendo culpados de posibles arbitrajes preparados para facilitar el camino de la albiceleste hacia la Copa del Mundo.
Los balcánicos vencieron por la mínima 2-1 a Marruecos en la lucha por el 3º y 4º puesto y consiguen situarse entre las tres mejores selecciones en los dos últimos mundiales.
La evolución de las selecciones asiáticas en las citas mundialistas ha ido mejorando con el tiempo cada vez más, pero aún sigue estando muy lejos de los grandes números de Europa y Sudamérica.
Qatar 2022 será el último gran torneo de muchos astros del planeta fútbol que, durante esta década, han hecho reír, llorar, disfrutar y lamentar a millones de aficionados.
Varias han sido las selecciones, la gran mayoría europeas, que han fracasado estrepitosamente en la segunda Copa del Mundo en la historia celebrada en Asia.
La selección marroquí hizo historia, tras eliminar a Portugal en cuartos de final, siendo el primer combinado nacional africano en llegar a unas semifinales de un Mundial.
Tras el cambio de entrenador en el seno de la selección, La Roja mantendrá el mismo estilo combinativo y asociativo de juego que lleva predominando desde hace más de 15 años.
La Selección Española lleva desde Sudáfrica 2010, Mundial que ganó, sin llegar a cuartos de final. Se cumplirán más de 15 de años en el próximo campeonato del mundo.
Tras un encuentro muy táctico, lento y sin ocasiones claras, Marruecos se llevaría el partido en una errática tanda de penaltis para los españoles, donde brilló Bono.
El astro parisino y el delantero del Milán fueron los goleadores en la victoria 3-1 frente a Polonia. Giroud se convierte en el máximo goleador de la historia de Francia con 52 goles.
La albiceleste sella su billete a cuartos tras ganar a Australia. Argentina fue superior y tuvo ocasiones para conseguir una renta mayor, pero no sentenció y terminó sufriendo.