La sólida moral católica de la que siempre ha alardeado la derecha en este país se desmorona con la corrupción interna de un partido que ya no la defiende.
La gruesa cadena de la fachada tenía derecho de asilo por lo que si un perseguido de la justicia se sujetaba a ella, era protegido por el administrador del Hospital.
Entre los debates y conclusiones que han aflorado en la Conferencia Política del PSOE este fin de semana, la laicidad del Estado ha adquirido un papel relevante.