Se pone caliente la cosa

Vodka. / Pixabay
Vodka. / Pixabay

A mi amigo del alma de vez en cuando le da por investigar temas de interés general. Hoy me trae uno del que saca una conclusión insospechada e inesperada. / Relato de Humor.

Obdulio se me aparece en casa con una botella de vodka vacía en la mano. Trato de adivinar qué se trae entre manos, además de la botella, pero no logro dar pie-con-corcho. Sólo me queda preguntarle:

—¿Cuál es el chiste con el recipiente de cristal que sirve para contener líquidos, Obdu?

—Acabo de leer que el consumo de alcohol en Rusia ha disminuido 43% en los últimos años.

—¡Qué bien! Me imagino que hayan hecho una gran campaña sobre el abuso etílico en la patria de Tolstoi. 

—Parece que sí. Pero creo que hay otra razón detrás de la cifra.

—¿Cuál?

—El cambio climático. Como la cosa se está poniendo caliente, hace falta menos alcohol para calentarse en el crudo invierno ruso.

—Mmm… es posible. Habría que averiguar si en otros países cercanos a la patria de Dostoievski sucede lo mismo. Por ejemplo, en Ucrania, la patria de Shevchenko.

—Estoy seguro que Zelensky lo sabe.

—Bueno, para algo es el presidente del país. ¿Por qué no le das una llamadita y le preguntas? El hombre es humorista, igual que tú.

Obdulio se queda mirándome fijamente durante diecisiete segundos, dagas y puñales saliéndole de los ojos saltones. Al fin me dispara:

—¿Serás tonto? ¿Pa terminar en un juicio político igual que el Trump? ¡Naaaaa!

Este Obdu nunca deja de asombrarme. @mundiario

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